Se realizó el XV Congreso del POR

Cada Congreso es una conquista política en la tarea histórica de construir el partido revolucionario en nuestro país como sección del Partido Internacional que estamos poniendo de pie, el Comité de Enlace por la Reconstrucción de la Cuarta Internacional (CERCI).

A los camaradas que asisten por primera vez y especialmente a los que provienen de otras organizaciones les llama la atención el orden y disciplina del Congreso, la cantidad de camaradas que intervienen y la calidad de sus intervenciones, planteando divergencias y debates, abordando todos los puntos del temario, ejerciendo el centralismo democrático en la máxima instancia del Partido, contribuyendo así, colectivamente, a la elevación política de toda la militancia.

El debate de la situación internacional estuvo centrado en la guerra en Ucrania, aunque el documento en debate era previo a la crisis. La actualidad de la guerra permitió verificar la certeza de las tesis planteadas en el documento de convocatoria que fue aprobado en el Congreso, como también definiciones anteriores del Partido y del CERCI.

Las tesis del documento de Situación Política Internacional muestran cómo ha impactado la pandemia, hasta qué extremo de barbarie puede llegar la guerra comercial para controlar y maniobrar para imponer las vacunas de EE.UU. desabasteciendo a las semicolonias y los sectores más vulnerables de la sociedad. Cómo la pandemia agravó la crisis del capitalismo en desintegración, con su gran explosión en 2008, que no había sido cerrada. Se mostró la incapacidad de la burguesía para atender la salud de los oprimidos y el fracaso de su política de aislamiento social a la que se adaptaron las direcciones políticas y sindicales paralizando a las masas, bloqueando la posibilidad de intervenir con sus propios métodos en la crisis. Esa parálisis fue utilizada por los gobiernos y las empresas para arremeter contra las condiciones de vida y de trabajo de cientos de millones de trabajadores en el mundo. Asistimos a una fuerte destrucción de fuerzas productivas en este último período, crece la desocupación, la miseria y el hambre en todo el mundo, los trabajos son cada vez más precarizados. La recuperación económica que se inició en 2021 y la que se proyecta para los próximos años no alcanza a restablecer los niveles previos a la pandemia.

Bajo la pandemia creció fuertemente el auxilio financiero a las grandes corporaciones, que acrecentaron sus ganancias. La riqueza sigue concentrándose aumentando la desigualdad social insoportable. Los billones de dólares emitidos para “socorrer” a los capitalistas agigantan el parasitismo financiero.

La guerra comercial avanzó aceleradamente por las medidas de Trump especialmente contra China y Europa, que tenían por objetivo recuperar la economía de EEUU y su papel hegemónico, amenazado por el crecimiento chino. Ese agravamiento tiende a transformarse en guerra bélica, como se verifica en estos días. Biden no pudo más que seguir las tendencias que se desarrollaban. Asistimos a un agotamiento del reparto del mundo que se operó después de la segunda Guerra Mundial y a un agotamiento del respiro que significó para el capitalismo el fuerte avance de la restauración capitalista en China, Rusia y en Europa del Este. La magnitud de la crisis impone al capital financiero ir más a fondo y presionar por apoderarse de los recursos y las empresas estatizadas en esos países.

El documento resalta la importancia histórica que tuvo para el imperialismo el derrumbe de la URSS, que le permitió avanzar rápidamente con los procesos de restauración en el Este europeo y exrepúblicas soviéticas y también con la implantación de la OTAN, que se apoyó en los movimientos nacionalistas, derechistas y en el odio que generó en las masas la política criminal del stalinismo.

Y también la importancia que tiene la ausencia de dirección revolucionaria internacional del proletariado. Su máxima expresión, la III Internacional, fue liquidada por Stalin. Y la IV no estuvo a la altura de poder ocupar su lugar. El proletariado paga muy caro esas derrotas que no han podido ser superadas. Es por eso urgente, imprescindible, avanzar con la puesta en pie de partidos revolucionarios en todos los países y reconstruir la Internacional, el Partido Mundial de la Revolución Socialista. Las masas luchan como pueden, resisten los embates de la descomposición capitalista, producen rebeliones extraordinarias y aparece una y otra vez dramáticamente la ausencia de dirección revolucionaria que las exprese y las oriente a la victoria. Recomendamos el estudio de este documento que tratamos de sintetizar y que ha sido también base del debate en el Congreso de la sección brasilera del CERCI.

El debate de la situación política nacional resaltó la importancia de haber caracterizado con precisión qué haría el gobierno de Fernández, centrado en reconocer y pagar toda la deuda externa extraordinaria, como exige la burguesía y el imperialismo, comprometiendo la recuperación económica del país y la resolución de los problemas más urgentes de los oprimidos con niveles de pobreza, desocupación y miseria extraordinarios. Se verifica que las masas van perdiendo las ilusiones en ese gobierno que creían podría revertir la situación desastrosa que dejó el anterior. El gobierno se sostiene por el papel de las direcciones sindicales y sociales que bloquean las luchas, las aíslan en nombre de defender su gobierno. Esta política conciliadora que permitió un fuerte avance contra salarios, jubilaciones y empleo, arrancó mucho antes, garantizándole a Macri la gobernabilidad para que llegara al fin de su mandato.

El gobierno de Fernández se encuentra en crisis y expresa el agotamiento del ciclo nacionalista burgués, sometido cada vez más abiertamente al capital financiero. En lo esencial muestra una continuidad con el gobierno anterior.

El documento señala que la situación de las masas es extremadamente grave, que son décadas de retroceso en las condiciones materiales a un nivel que es insoportable. Lo que coloca a la orden del día la lucha por la reivindicaciones más urgentes, los reclamos más elementales contra la desocupación la carestía y el hambre, que sólo pueden ser impuestos por medio de la acción directa de masas. La subordinación del gobierno al pago de la deuda externa y su respeto a la gran propiedad hace que sea imposible satisfacer esos reclamos.

La situación catastrófica de las masas exige una respuesta extraordinaria y la dirección de los sindicatos es el mayor dique de contención. Además, han hecho un daño enorme en estos años de pandemia con su parálisis. Es imprescindible recuperar la independencia política de los sindicatos expulsando a la burocracia entregada al gobierno y los grandes capitalistas.

El documento también plantea la necesidad de un balance de la crisis sanitaria mostrando que el gobierno fracasó, para desarmar su discurso que es tomado por buena parte de la población.

Se pone de relieve que sólo la clase obrera acaudillando al conjunto de los oprimidos puede resistir y defender a la nación frente a la embestida del imperialismo. La cuestión nacional aparecerá con más fuerza y se plantea cuál es el programa que responde a todos los ajustes y el saqueo, colocando a la orden del día la necesidad del frente único antiimperialista, de los métodos y la estrategia de poder de la clase obrera.

El documento denuncia el papel del Congreso de la Nación como una cueva de parásitos a la que hay que combatir, para no sembrar la más mínima ilusión de que ahí se pueden resolver alguno de nuestros problemas, enfrentando el discurso de la izquierda centrista que no se atreve a cuestionarlo y se adapta a esas ilusiones.

El debate del documento de balance político organizativo reflejó un avance respecto de congresos anteriores, permitiendo balancear el acierto de nuestra línea de intervención frente a la pandemia llamando a desconocer desde el primer momento toda autoridad del gobierno para enfrentar la crisis sanitaria. Y, fundamentalmente el acierto de la pronta intervención en las calles en Neuquén, poniéndose a la cabeza de la lucha en defensa de la vida de las masas. En este punto se destaca la importancia que tuvo la elaboración del POR de Brasil, que mejor expresó la línea proletaria ante la nueva situación.

Destaca cómo intervenimos en los procesos electorales defendiendo las banderas revolucionarias de la clase obrera, advirtiendo sobre la derechización del peronismo.

En el frente docente fue fundamental nuestra línea defendiendo la presencialidad de la educación y las asambleas contra las políticas de la burocracia y la izquierda.

Identificamos que la tendencia a la lucha de masas está latente y que se demostraba con la rebelión de más de 40 días en Neuquén y las luchas de Chubut y Mendoza contra el saqueo minero enfrentado la política nacional. En la posibilidad de desarrollar la ruptura de las masas con las ilusiones en el peronismo radica el aspecto fundamental de la situación política. Se balancea la intervención en la clase obrera, destacando la intervención en varios frentes, impactados por la pandemia, cierres, suspensiones y despidos. Así como reconocer que la vanguardia de la clase obrera sigue influenciada por el nacionalismo burgués, lo que requiere una atención especial sobre cómo intervenir, cómo aplicar la táctica de frente único.

En un logro la recuperación de varias seccionales de ATEN y el profundo acierto del Partido en el desarrollo de la táctica frentista, que fue importante para derrotar a la burocracia y que coloca al partido en una situación de especial responsabilidad de dirección.

En el plano organizativo se destacó la importancia de garantizar el funcionamiento partidario presencial ante la pandemia, ante el temor al contagio y las medidas represivas. Fue una prueba de fuego para el partido en general y cada organismo para garantizar el funcionamiento. Pese a todos los obstáculos se realizaron congresos regionales.

Se balancearon las dificultades que tuvo la dirección del CERCI para funcionar, destacando especialmente la importancia de combatir las tendencias federativistas. Ante la situación de profunda crisis mundial es necesaria una respuesta centralizada.  Corresponde preparar desde ahora mismo el próximo Congreso Internacional que se realizará a mitad de año.

Destacamos la regularización en la salida de Masas, aumentando la frecuencia y la elaboración colectiva de notas, y también haber publicado 3 tomos de las Obras Escogidas de Guillermo Lora, así como “Los revolucionarios en los parlamentos burgueses”, que se agregaron a “Los Cuatro Primeros Congresos de la III Internacional” y nuestro Programa, basamento de nuestro Partido.

¡VIVA EL XV CONGRESO DEL POR!

(nota de MASAS nº411)

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *