Trabajadores de RA en lucha contra salarios de hambre

La patronal responde con despidos y suspensiones.-

En las últimas semanas los trabajadores de la textil RA Intertrading vienen llevando a cabo un plan de lucha por un aumento inmediato de los salarios cuyo valor es miserable. La empresa respondió a los reclamos con más de 30 sanciones y varios despidos, mostrando así toda su prepotencia para que nadie reclame en contra de los abusos que sufren día a día

Los trabajadores, apoyándose en asambleas, fueron realizando paros escalonados y bajas de producción de forma contundente. Reclaman que se les aumente el valor de la hora que se les paga, que en varias categorías no supera los $200 pesos por hora. A la vez piden que se bajen los topes de producción que les exigen por día.  La patronal utiliza los “premios” por productividad jugando con el hambre y la imposibilidad de llegar a fin de mes. La lucha de los trabajadores constituyó un paso adelante en su organización, diciendo basta a tanto maltrato con los métodos de la clase obrera. A pesar de que la dirección de sindicato no convoca a elecciones de delegados ellos mismos eligieron su propio comité de reclamos y pusieron en jaque a una patronal acostumbrada a manejarse con total impunidad.

A la patronal de RA, que trabaja para grandes marcas multinacionales, no les bastó con pagar salarios miserables, ni con exprimir día a día para llegar a topes inalcanzables, ni con obligar a trabajar hacinados durante toda la pandemia, sino que el martes 7 decidió sancionar a más de 30 compañeros y luego despidió a varios de ellos. La empresa persigue sindicalmente a los compañeros que reclaman, pisoteando el legítimo derecho a protestar, buscando meter miedo entre los trabajadores.

Desde un principio saludamos la lucha de los trabajadores de RA, a la caída del poder adquisitivo producto de la inflación se suma a que los convenios de la industria textil son de los peores de la industria. Para tener una idea la empresa RA tiene más de 800 trabajadores incluidos en el convenio del vestido donde el básico de un oficial de costura es de $32 mil pesos, o sea por debajo del salario mínimo decretado por el gobierno. Una miseria por donde se lo mire.

Del otro lado los trabajadores denuncian que la empresa tiene ganancias extraordinarias, señalando que aumentó  su producción incluso durante la pandemia, exportando buena parte de su producción. Fueron los  mismos compañeros que calculan que por una camiseta de futbol que se vende a $17 mil pesos un costurero recibe solo $40. Los otros responsables de esta situación son las grandes marcas (Adidas, Nike, Puma) que se benefician con estos salarios de hambre, tercerizando su producción en este tipo de empresas.

Cabe señalar el rol de la dirección de los sindicatos que son los que vienen firmado estas paritarias miserables y que no hace nada para apoyar a los trabajadores que reclaman. El SOIVA no ha hecho nada ante las suspensiones y despidos, trabajando para dividir y desorganizar a los trabajadores, ellos terminan siendo cómplices de las sanciones hacia los trabajadores. Fue en esta misma fábrica donde en 2016 la burocracia sindical expulsó del sindicato a tres delegados por organizarse de forma independiente (les quitó sus derechos como afiliados).

Desde el POR y el boletín Nuestra Clase nos ponemos a disposición de los trabajadores de RA en lucha por sus condiciones de vida y en contra de cualquier tipo de sanción.  Es importante profundizar la organización independiente en el gremio textil e ir forjando la unidad de los distintos sectores que salen a la lucha. Es en este proceso se va forjando una dirección y una referencia para todo el gremio.

 

(nota de MASAS nº411)

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