Gran movilización por la estatización de Vicentin en el “Día de la Independencia”

Los obreros del sindicato de aceiteros de Reconquista y de Rosario, respaldados por decenas de organizaciones sociales, políticas, estudiantiles y sindicales, marcharon en Reconquista y Rosario en defensa de sus puestos de trabajo y en favor de la expropiación e intervención de la empresa. Rechazan además la extranjerización de Vicentin.

La lucha por la expropiación de Vicentin tiene gran importancia para la provincia y para todo el país. Para impedir que se la apropien las multinacionales o la desguacen. En todo el grupo trabajan más de 7.000 trabajadores.

Estamos en una situación extraordinaria de destrucción de cientos de miles y millones de puestos de trabajo aquí y en todo el mundo, cierran decenas de miles de fábricas, talleres y comercios. Está en nuestras manos detener la barbarie capitalista, con nuestros propios métodos de lucha, con nuestra organización y política independiente. Confiemos sólo en nuestras propias fuerzas. El Congreso y la Justicia están al servicio de los intereses del gran capital.

Debemos decir con claridad que las leyes que regulan concursos y quiebras están hechas a medida de las necesidades de los capitalistas, de hecho, modificadas por el kirchnerismo para impedir que las expropiaciones se conviertan en estatizaciones. Los trabajadores no debemos enredarnos en sus vericuetos. No generar ninguna ilusión en la Ley y la Justicia. Debemos expresar una posición independiente frente a todos esos procesos. Todos los activos de las empresas deben ser expropiados sin pago y la empresa estatizada bajo control obrero colectivo. Que la deuda con los bancos privados del exterior y locales se la arreglen los directivos y accionistas de la empresa.

El comité de control no es el camino a la estatización, sino a la legitimación de la estafa

Los trabajadores aceiteros de Vicentin Avellaneda informan que eligieron a Leandro Monzón, integrante de la comisión interna de la planta, como su representante en el Comité de Control que actúa en el concurso de la empresa, donde desempeñará tareas junto a un representante de los trabajadores de San Lorenzo, uno por el Banco Nación, uno de ACA (cooperativas agrarias) y dos por los bancos internacionales. Destacamos el hecho de que los trabajadores son quienes han elegido a su representante en el Comité.

Reivindicamos la democracia obrera que ejerce el Sindicato de Aceiteros, en este caso con la elección de los representantes al Comité de Control. Sin embargo no debemos olvidar que el comité de control es terreno enemigo y la intervención de los obreros en este terreno debe ser de denuncia. Será fundamental que toda la información y las decisiones de este comité sean discutidas en las asambleas de base, hacer comisiones obreras propias para el seguimiento y la denuncia de todas las maniobras de los empresarios. Subordinar la intervención en este comité a la necesidad de fortalecer la lucha por la estatizacion sin pago de Vicentin bajo control obrero colectivo.

Este “Comité de Control” es establecido por la ley de concursos y quiebras, una institución patronal para defender los intereses de todos los acreedores, para que recuperen todo lo que Vicentin les debe, o lo más que se pueda. Esto puede signifi car la venta de la empresa en su totalidad o su desguace. Los trabajadores no tienen poder de veto en ese Comité. Este proceso es comandado por la Justicia burguesa, que reconocerá los créditos que reclaman los bancos del exterior, los bancos locales y los productores que entregaron sus cosechas.

Los trabajadores deben alertar sobre las consecuencias que puede tener la aplicación de esta Ley. Las posibilidades de acceder a los documentos e información sobre lo que sucedió será muy limitada. Las empresas, sus organismos de administración, sus auditores, son especialistas en ocultar la realidad de sus negocios. No nos olvidemos que estamos frente a un fraude de gran magnitud.

La independencia política del proletariado es la única garantía de soberanía nacional

Los compañeros aceiteros dicen que «Ante lo que se verifica cada día más como una monumental estafa y defraudación a la banca pública, es fundamental para la defensa de los puestos de trabajo la participación obrera que la ley impone». Pero es necesario insistir que los puestos de trabajo sólo se defienden con los métodos de la clase obrera, no es en ese ámbito que se pueden defender los puestos de trabajo. La Ley y la Justicia ni aseguran los puestos de trabajo ni la defensa del patrimonio nacional. Este camino no es el de la expropiación, es el camino que imponen los grandes capitalistas para evitar que el Estado tome el control de la empresa.

Vicentin, como todas las exportadoras, como los grandes terratenientes, defienden un interés contrario a la Nación y los trabajadores. La lucha por conquistar la soberanía nacional pasa por expulsar a las multinacionales, estatizar el comercio exterior y la banca, desconocer la deuda externa, estatizar todas las empresas vitales para el país y terminar con los grandes terratenientes.

La tarea de independizar nuestro país y dejar de ser una colonia del imperialismo es de interés de todos los oprimidos, pero semejante tarea exige la dirección política por parte de la clase obrera, la única clase que puede llevar esta lucha consecuentemente hasta el fi nal. Los pequeños productores agropecuarios estafados por Vicentin y otros pulpos sólo pueden terminar con ellos si se encolumnan detrás de la política de la clase obrera.