Charla debate sobre Vicentin: nuestra posición

El Espacio de Trabajadores de Zona Norte impulsó una charla debate en torno a la situación de Vicentin con la presencia de Daniel Yofra, secretario general del Sindicato de Aceiteros. Saludamos esta iniciativa y resaltamos la importancia de entablar un debate con este importante sector de la vanguardia obrera. El dirigente de aceiteros se posicionó por la defensa de la intervención de Vicentin por parte del Estado y afirmó que la decisión sobre la expropiación le corresponde a la justicia. Planteó el debate ideológico que implica la medida y la necesidad de defender la decisión del gobierno de intervenir la empresa. Sostuvo también que ellos ejercen el control obrero de sus condiciones de trabajo mediante los comités mixtos en las fábricas. El debate en torno a esta intervención se dio en términos fraternales y las distintas organizaciones presentaron sus posiciones oralmente. A continuación reproducimos la posición que presentamos en el evento.

¿Qué representa Vicentín?
Es la principal empresa de molienda de oleaginosas. Puede producir 29.500 toneladas por día. Es la mayor productora de biodiesel del país. En 2016 fue el primer exportador de aceites y el segundo de harinas. Tiene dos terminales portuarias. En 2017 produjo el 21% de la molienda de soja, en 2018 el 27%. Se ubica en el sexto puesto del ranking de exportadores agroindustriales.

Es un saqueo incluso en términos burgueses
Es empresa de grandes dimensiones que se encuentra en proceso de concurso de acreedores y cruzada por varios juicios por estafas. Las maniobras descaradas de venta de granos a precios irrisorios a empresas fantasma – en paraísos fiscales para que los empresarios garanticen sus ganancias afuera – pone en evidencia la necesidad de monopolizar el comercio exterior. Terminar con las triangulaciones que impiden conocer quién es el verdadero comprador y qué precio paga, garantizar el ingreso de divisas e impedir la fuga.

¿Qué tipo de expropiación planteaba el gobierno en un primer momento?
La expropiación con pago que plantea el gobierno es un rescate de la empresa, como lo dice el gobierno. No hay la más mínima intención de afectar patrimonialmente a los dueños, que fueron a pedir el salvataje del gobierno, porque no estaban en condiciones de sostenerla. El gobierno anticipó que será un modelo similar al de YPF, que como denunciamos en su momento, no era ninguna expropiación (sino compra de las acciones a Repsol a precio elevado), y dejando el 49% de las acciones en manos privadas. Si no se establece el monopolio estatal, la intervención del Estado es para favorecer los negocios de las multinacionales, como en el caso de YPF.

El rol de la justicia y el planteo actual del gobierno
El papel de la Justicia es preservar y proteger la gran propiedad, contra el interés de los trabajadores e incluso de los pequeños propietarios rurales a los que Vicentin debe muchísimo dinero. La maniobra de la Justicia es impedir que el Estado tome control de la empresa. El gobierno retrocedió inmediatamente pasando de una posible expropiación a una intervención.

La incapacidad de la burguesía nacional de ser consecuente con sus planteos
El retroceso del gobierno no es un hecho aislado, es reflejo de la cobardía de la clase a la que representa. Así también: El proyecto inicial de centralizar todos los recursos de salud en el Estado para planificar las acciones contra la pandemia fue retirado. El proyecto de impuesto a las grandes fortunas aún no se presentó al Congreso –aunque ya redujeron la cantidad de empresarios que alcanza y el porcentaje-. La negociación de la deuda externa que empezó con un recorte de los intereses a pagar ya se fue modificando de 38 a 50%, el roce con Techint por los despidos terminó con los trabajadores despedidos.

El sector agroexportador no puede estar en manos privadas
Este es un planteo básico de soberanía nacional, es una necesidad para el desarrollo del país incluso en términos burgueses. Este sector es de importancia fundamental para la economía del país. Solo 10 empresas controlan el 91% del comercio de granos, la mayoría multinacionales. El sector es de los que más dólares debieran ingresar. No solo debe ser expropiada Vicentin sino las empresas que concentran el comercio exterior de granos. Al igual que la salud y la educación, el comercio exterior y los puertos fueron privatizados. Ningún gobierno se atrevió a dar marcha atrás con ello.

Sólo la clase obrera puede dar una respuesta integral
El fondo del debate es la soberanía del país, en qué manos quedan los resortes de nuestra economía. La burguesía nacional da muestras de sobra de su cobardía, de su corrupción y su sometimiento al imperialismo. Es la clase obrera la única que puede ser consecuente, la estatización de todas las empresas que controlan el comercio exterior de granos tiene que ser bajo control obrero y como parte de un programa integral de desarrollo del país que incluya la nacionalización de la banca y el comercio exterior, la estatización de todas las fuentes de producción de energía como lo formuló la clase obrera en numerosos documentos de la CGT de los Argentinos o en los programas de La Falda y Huerta Grande. Es solamente si la clase obrera toma las riendas de la economía que podremos hablar de soberanía de lo contrario seguirá siendo el imperialismo, a través de las multinacionales, el que decida el destino del país

¿A qué nos referimos con estatización bajo control obrero colectivo?
Cuando hablamos de control obrero no nos referimos ni a la cooperativa que en realidad representa un retroceso histórico para los trabajadores, ni simplemente al control de las condiciones de trabajo. Nos referimos a nuestro derecho como explotados a conocer el famoso “secreto comercial”, a publicar y denunciar con precisión todas las maniobras que utiliza la burguesía para saquear el país, a saber, realmente cuánta riqueza producimos y decidir su destino, a tener un conocimiento certero de las fuerzas productivas que tiene el país. El control obrero de las empresas estatizadas lo planteamos como una escuela para la clase obrera para planificación de toda la economía.

La experiencia demuestra que los caminos legales, legislativos, judiciales son una trampa para reforzar la opresión colonial sobre nuestro país. Medidas tan elementales de lucha por la soberanía nacional sólo pueden ser lideradas por la clase obrera, acaudillando a los oprimidos, con sus propios métodos de lucha, ocupando los establecimientos, ocupando las calles y los puertos, imponiendo su control.
27-06-2020