SE PROFUNDIZA LA LUCHA EN CHUBUT

SE PROFUNDIZA LA LUCHA EN CHUBUT

La provocación en la madrugada del miércoles 4, con una patota de matones enviados por el gobernador y la burocracia del petróleo, para desalojar a las maestras que cortaban la ruta en el piquete de ruta 3 y 26 y con la complicidad de la policía, les salió mal. La noticia corrió por todo el país, tuvo una gran repercusión, y se ganaron la solidaridad de todos los trabajadores. La CTERA tuvo que convocar a paro nacional, otros gremios han adherido al paro y se realizó una extraordinaria movilización popular en Comodoro de repudio a la provocación, exigiendo que los gobiernos resuelvan el conflicto.

Los trabajadores vienen con una combinación de paro por tiempo indeterminado, cortes de ruta, tomas de escuelas y de edificios públicos. La crisis lejos de cerrarse se profundiza.

Estamos atravesando la séptima semana sin clases, con un conflicto que ya no se limita a los docentes, ni siquiera a los estatales que también están de paro, es la Provincia completa que está paralizada. La obra social no funciona, el Gobierno no paga a los proveedores, y han implementado un pago escalonado por el cual los últimos cobran después del 22 de cada mes, sumado a que no han cumplido con la cláusula gatillo, además las escuelas y los hospitales se caen a pedazos. El año pasado hubo una enorme huelga donde los docentes consiguieron la cláusula gatillo.

Un hecho fundamental de esta lucha ha sido el apoyo de los petroleros, que viajaban de incógnito y se bajaron del colectivo para solidarizarse con los docentes. El burócrata Avila, dirigente de los petroleros, ha sostenido no sólo la defensa del Gobierno sino que ha salido con una posición patronal. La patronal de la UOCRA amenaza con descontar 15 días a los trabajadores de la construcción.

Los medios tratan de presentar un conflicto entre trabajadores petroleros y estatales por los piquetes en la ruta. Nada de eso, es la burocracia, no los trabajadores los que atacan a los maestros. Los obreros petroleros de Chubut han dado importantes luchas, como la gran lucha de los dragones, aunque la burocracia controle el sindicato, esas experiencias están en la memoria colectiva. Como bien decía una maestra, “los petroleros son nuestros hermanos, amigos, y familia”, las bases apoyan la lucha.

Hacen bien las maestras en pedir el apoyo al sector que dirige el corazón económico de la provincia. No es momento de aflojar, es momento de profundizar la lucha, y exigir la renuncia del Gobernador, con tan larga y tan profunda huelga no puede limitarse al pedido de cobrar en fecha y que funcione la obra social. La devaluación del salario ha sido feroz, y los precios son mucho más altos en el sur, por lo tanto hay que poner en debate toda la economía de la provincia.

La provincia de Chubut no es pobre, tiene producción petrolera, ovina, pesca, y turismo, son las multinacionales las que se llevan las ganancias, mientras por ejemplo avanzan contra los derechos laborales de los petroleros con el cambio de convenio, y ha sido este gobierno quien endeudó a generaciones de chubutenses.

La actitud del gobierno, lejos de deponerse, aumenta la tensión con sus declaraciones, recién el viernes pasado terminó de depositar los sueldos de julio. Hace tres semanas la producción de petróleo se ve afectada por los cortes de ruta, YPF anunció que pararía la producción por sabotajes.

El Gobierno quiere sacar provecho de este conflicto argumentando que la única forma de superar la crisis económica es abrirle paso a la megaminería. Recordemos que Santa Cruz tiene mineras que están contaminando todo, pero en Chubut las multinacionales no han logrado entrar a la cordillera porque tienen la oposición de toda la población. Chubut es una de las 3 provincias más endeudadas en dólares.

Por las condiciones laborales de los estatales, por presupuesto educativo y para salud, por no pagar el endeudamiento en dólares, por condiciones dignas de vida es esta lucha. Toda la unidad por abajo, y medidas de acción directa, hay que pasar por encima de las burocracias. Las bases han dado sobradas muestras de fortaleza, los trabajadores del país siguen atentos la lucha de Chubut. En Chubut se está rompiendo la “paz social” que tienen acordada para llegar a octubre sin conflicto y garantizar una transición democrática y que no sean las masas las que impongan en las calles la caída del gobierno de Macri, es decir, la burocracia está cuidando la gobernabilidad burguesa.

Un paso adelante en la organización podría ser conformar comités de huelga en todas las ciudades, de delegados, para organizar la huelga, de multisectoriales que superen la mesa chica de la intersindical. Cuando las bases se mueven y generan tal huelga el régimen tiembla y también tiembla la burocracia sindical, que está acostumbrada a conciliar con el Gobierno.

Las bases han demostrado una enorme voluntad de lucha y firmeza ¡es hora de organizarla! ¡¡Adelante compañeras!! ¡La única forma de imponer los reclamos es como ustedes están haciendo!

-Viva la lucha de Chubut
-Por la unidad y la nacionalización del conflicto
-Tomemos la lucha en nuestras manos, empecemos a poner en pie los comités de huelga

(De masas n° 358)

 

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