Boletín de la Púrpura – Marzo de 2019
Boletín de la Púrpura – Marzo de 2019
El programa de Macri, los Gobernadores y el FMI:
Reducción salarial y Reforma Educativa
Apenas seis provincias llegaron a un acuerdo paritario en febrero: Neuquén, Misiones, Mendoza, Chubut, Santiagodel Estero y Tucumán. Entre ellas se destaca el papel conciliador de la burocracia kirchnerista del TEP en Neuquén, que se apresuró a garantizarle la paz social a Gutiérrez antes de las elecciones, cuando había condiciones para arrancarles una recuperación salarial. Se revela también la magnitud de la traición del PTS, cuyo divisionismo en las últimas elecciones significó perder buena parte de las seccionales opositoras, entre ellas la capital neuquina.
Los ajustes por inflación que proponen los gobiernos provinciales son una trampa porque significa aceptar el retroceso salarial que lograron imponer en todos los años de gobierno de Macri. La CTERA llamó a dos días deparo y adhirió al paro internacional de mujeres, exigiendo la convocatoria a la paritaria nacional docente. Esta bandera les permite ahorrarse el tomar posición sobre cuánto debemos cobrar las docentes. Desde la Agrupación Púrpura decimos sin ambigüedad que el salario mínimo debe ser igual a la canasta familiar para un cargo de jornada simple sin antigüedad (no menos de $40.000,y más aún en las provincias donde el costo de vida es mayor).
La paritaria nacional fue una herramienta creada por el kirchnerismo en la Ley de Financiamiento Educativo,cuyo objetivo fue evitar la renacionalización de la educación.
El kirchnerismo no solo no revirtió la Reforma menemista que provincializó la educación, sino que además sentó un mecanismo para salvarla, agregando una porción de presupuesto nacional, el cual fue ampliamente utilizado para hacer pasar otros aspectos de la Reforma.
Como parte de este plan incluyeron la paritaria nacional,que sirvió para administrar los conflictos, pero nunca para garantizar que las docentes tengamos un salario que nos permita vivir sin tener que tomar horas y cargos para llegar a fin de mes. Peor aún, muchas veces la paritaria nacional en manos del kirchnerismo más que un piso estableció el techo salarial.
Pero el Gobierno no solo busca avanzar sobre nuestros salarios, sino también en la Reforma Educativa. El cierre de los bachilleratos de adultos en Provincia de Buenos Aires, el intento de cerrar las escuelas nocturnas y los profesorados en Capital Federal, la avanzada por otorgar mayor poder a los directivos para definir cargos por encima del Estatuto Docente, la reforma curricular en Neuquén que, maquillada con un lenguaje progresista en pos de la diversidad, busca implementar las áreas y eliminara la fuerza la repitencia, entre tantos otros, son muestra del ataque generalizado hacia la educación. Es evidente que no basta con reivindicar “que se cumpla la ley” de la paritaria, hace falta un programa y un plan de lucha para enfrentar el ataque de conjunto. La entrega de la CTERA no se limita a la cuestión salarial sino también a las condiciones laborales que han afectado principalmente la estabilidad laboral de los docentes.
Detrás del ataque están los organismos del imperialismo,fundamentalmente el Banco Mundial, que le dicta las instrucciones al Gobierno, como parte de una política dirigida a toda Latinoamérica. Para ellos los docentes somos los principales responsables de la crisis educativa y nuestros sindicatos el primer objetivo que debe ser barrido.
Este año la burguesía y sus partidos querrán sacarnos de las calles para ofrecernos una salida institucional a la crisis. La polarización electoral está actuando sobre organizaciones que son parte de los frentes multicolor para que abandonen sus diferencias con la burocracia Celeste y se adhieran al “frente antiMacri”. Advertimos que las elecciones y el frente “antiMacri” son una trampa para desmovilizarnos, que debemos confiar exclusivamente en nuestras propias organizaciones. Si hoy Macri sigue gobernando es por la complicidad abierta de los partidos dela oposición, del peronismo y del kirchnerismo, de la burocracia sindical. No depositemos ilusiones en un frente conformado por quienes han garantizado la gobernabilidad a Macri todos estos años. Alertamos también sobre el papel que juega un sector de la izquierda que se ha adaptado
profundamente al legalismo burgués y propone salidas como asambleas constituyentes o consultas populares.Decimos con claridad que el único camino para imponer nuestras reivindicaciones es organizados y en las calles.
No alcanza con un paro aislado, en necesario redoblarla presión sobre la burocracia para desarrollar un plan de lucha nacional con un programa que esté a la altura de enfrentar la política educativa de la burguesía decadente:
– Renacionalizar la educación, con presupuesto 100% nacional
– Acabar con la educación privada, fundamentalmente en manos de la Iglesia
– Establecer un sistema único de educación estatal gratuito
– Salario mínimo igual a la Canasta Familiar para un cargo de jornada simple sin antigüedad.