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EL GOBIERNO ESTÁ NEGOCIANDO QUE EL PAÍS PAGUE LA DEUDA TOMADA PARA UN PEQUEÑO GRUPO DE EMPRESARIOS QUE SE LLEVÓ LOS DÓLARES

El Banco Central reporta que la fuga de 86.000 millones de dólares tiene nombre y apellido. El Grupo Clarín, Techint, Arcor, Pampa Energía y Aceitera General Deheza son los mayores responsables de la fuga de capitales.

 

Sus principales accionistas Héctor Magnetto, Paolo Rocca, Luis Pagani, Marcelo Mindlin y Miguel Acevedo, forman parte de la Asociación Empresarial AEA, y participan de IDEA y de la Unión Industrial.

 

Una deuda que nos quieren hacer pagar a todos, debilitando aún más la economía nacional. Ellos son los que más presionan internamente para que se llegue a un acuerdo con los acreedores, en las mejores condiciones para ellos, los mismos empresarios que realizaron la fuga.

 

8.500 empresas compraron 52.000 millones de dólares y, de ese total, 853 empresas compraron poco más de 41.000 millones. El resto de las compras de dólares fueron realizadas como personas.

 

Los compradores integran la lista de las 50 personas más ricas de la Argentina.

 

En varias empresas que fugaron divisas -Telecom, Galicia, YPF o Pampa Energía- aparece como socio el fondo BlackRock, el principal acreedor de la Argentina.

 

Encabeza el ranking de la fuga Marcelo Mindlin, con cerca de 1.600 millones de dólares (entre varias de sus empresas, como Pampa Energía, Petrobrás, Transportadora de Gas del Sur y Edenor). Mindlin blanqueó 44 millones de dólares en 2017. Debemos analizar qué relación tiene con los tarifazos en gas y electricidad, que seguramente generaron ganancias extraordinarias, que supieron transformar en dólares que se llevaron.

 

El Grupo Clarín fugó unos 650 millones de dólares, por medio de Telecom, la empresa que adquirió en 2017. Telefónica más de mil millones. Entre Fiat Auto e Iveco, cerca de 500 millones de dólares. Una suma similar los Rocca, a través de distintas empresas, como Tecpetrol, Siderar y Transportadora de Gas del Norte. Tanto Arcor como Aceitera General Deheza fugaron 250 millones de dólares cada una.

 

 

Entre los mayores fugadores, con más de 600 millones de dólares aparece el Grupo Cohen que es señalado como la mayor “banca privada del país” (así se denomina el servicio de transferencia ilegal de capitales a guaridas fiscales).

 

El 1° de Marzo Alberto Fernández en su discurso al Congreso decía que “había ordenado al Banco Central elaborar un informe con el detalle de quiénes habían sacado del país el dinero que ahora reclaman los acreedores externos. “Esas prácticas son absolutamente reñidas con cualquier idea de progreso. Es la especulación más dañina que puede enfrentar una sociedad: endeudarse solo para el beneficio de los especuladores y del prestamista. Debemos saber lo que pasó, quiénes permitieron que ello suceda y quiénes se beneficiaron con esas prácticas. Necesitamos no hacernos los distraídos ante lo ocurrido, porque el riesgo que acarrea tal distracción es la concreción de un daño inmenso que deberían soportar varias generaciones de argentinos. Nunca más a un endeudamiento insostenible. Nunca más a decisiones que se toman con ínfulas tecnocráticas de la noche a la mañana, y de espaldas al pueblo. Nunca más a la puerta giratoria de dólares que ingresan por el endeudamiento y se fugan dejando tierra arrasada a su paso”.

 

Ahora que ya tenemos el informe, muy detallado, de quiénes se la llevaron, ¿qué hace el gobierno? CONVALIDAR EL SAQUEO, RECONOCER LA DEUDA Y PAGAR. ¿En qué quedaron sus palabras? ¿Qué valor tienen?

 

Se repite la historia. Los que saquearon el país con procedimientos parecidos bajo la dictadura militar o con Menem/De la Rúa, siguen impunes, cada vez más enriquecidos a costa del hambre, la desocupación, la miseria de millones de familias. Pero cabe aclarar que bajo todos los gobiernos hubo una importante fuga de divisas, ninguno fue capaz de cortar con esta tendencia parasitaria del capital.

 

En la introducción del informe del Banco Central se dice con toda claridad que “Lejos de ser una novedad, las crisis de deuda son para Argentina un fenómeno conocido y largamente estudiado. De forma reincidente, se ensayaron en nuestro país programas de liberalización y endeudamiento, alcanzando siempre los mismos resultados: severas crisis económicas que afectan negativamente las condiciones de vida de la población, al tiempo que reducen los márgenes de soberanía política y los grados de independencia para la decisión económica. La crisis actual no es la excepción y sus dramáticas consecuencias resultan hoy palpables”.

 

¿Qué se hará con los saqueadores? Se los auxilia para pagar los salarios de sus trabajadores, se los subsidia para que no quiebren, miran para otro lado cuando despidan, suspendan o reduzcan salarios. Lo que corresponde es expropiar sin pago a todos los responsables del saqueo, de esa forma empezaremos a recuperar lo que es nuestro.

 

La utilización del “Nunca Más” aplicado al endeudamiento, por parte del Presidente y del informe del BCRA, es una estafa. Los mismos sectores empresarios que tuvieron el gobierno bajo la dictadura genocida, que provocaron un gran endeudamiento, son los mismos que gobernaron ahora con Macri. ¡Basta de burlas! Para que realmente haya un Nunca Más hay que terminar de raíz con esos sectores parasitarios y saqueadores.

 

(nota de MASAS nº 371)

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