EDENOR debe ser estatizada
Edenor opera monopólicamente la mayor red de distribución de electricidad, con sus 3,2 millones de clientes y representa aproximadamente el 20% de la demanda total de electricidad en el país. Es la más importante de Argentina y probablemente de Latinoamérica.
Pampa Energía (del empresario Marcelo Mindlin) tenía el 53,7% de las acciones de Edenor, mientras que ANSES tiene 27,8% del paquete accionario. El resto son inversores financieros como Joe Lewis o Black Rock.
El grupo Vila-Manzano-Filiberti le compró Edenor a Pampa Energía. La autorización de esta venta ahora está en manos del ENRE (Ente Nacional de Regulación Energética), quien debe aprobarla finalmente.
Edenor informó que recibió casi $3.200 millones de Estado nacional en compensación por brindar el servicio a barrios populares desde 2017 al 2020, que según se anunció, se utilizarán para mantener y sostener la calidad del servicio y la red eléctrica.
¿Quiénes son los compradores? Los dueños del canal América TV y el principal proveedor de cloro para Aysa, el inglés Michael Stevens y Aidar Bestene
Manzano y Vila dueños de América TV, son dueños de otra empresa de distribución eléctrica: Edemsa, que distribuye en Mendoza y zona de influencia. Con lo cual se potencia el peso de este grupo monopólico del sector.
Tanto Edenor como Edemsa tienen deudas millonarias con Cammesa que es la empresa que le vende la energía. Edenor debe más de 225 millones de dólares, en tanto que Edemsa 120 millones de dólares.
Los compradores incrementan de esta forma su deuda a 345 millones y además deben pagar las acciones a Midlin. Evidentemente se trata de un gran negocio, ya que las deudas que no pagan las distribuidoras a las generadoras, las termina pagando el Estado.
Pagni en La Nación afirma que los compradores son íntimos amigos de Sergio Massa quien habría incorporado en el Presupuesto Nacional un artículo referido a que toda esa deuda no sería discutida con Cammesa sino negociada en la Secretaría de Energía. Lo que hace particularmente sospechoso qué se negociará y si se transformará en otro saqueo del patrimonio nacional.
Desde diciembre de 2015, hasta abril de 2020, el grupo Pampa Energía y sus principales accionistas y directores transfirieron a cuentas propias en el exterior más de 1.100 millones de dólares. Esto da una idea de las ganancias extraordinarias que genera el sector y que ese excedente termina transformándose en dólares que se llevan al exterior.
¿Cómo terminar con estas maniobras, con el saqueo, con la extorsión permanente para que se suban las tarifas, para que se perdonen deudas, para que les entreguen subsidios, etc?
Estatizando sin pago y bajo control obrero colectivo, todo el sector energético que es vital para el país. Desde la generación hasta la distribución.