Docentes – Buenos Aires: Exigimos que el gobierno garantice las condiciones para la vuelta a la presencialidad

En estos días, muchos docentes hemos sido convocados a concurrir a las escuelas, ya sea para asistir a las Jornadas institucionales o para trabajar con los estudiantes que no estuvieron vinculados durante el 2020, preparando lo que sería el inicio del ciclo lectivo 2021 en las aulas.

Además de que en la provincia la circulación del virus sigue siendo alta lo que implica que aún nos encontramos en riesgo y aún no tenemos fecha de vacunación, desde la Purpura en Suteba nos preguntamos también si la infraestructura de nuestras escuelas está en condiciones para recibir a docentes y alumnos.

En el mes de octubre, la DGCyE envió el “Plan jurisdiccional de la Pcia. de Bs. As. para un regreso seguro a las clases”. Allí, se brindan orientaciones para el retorno a la presencialidad y se estipulan las condiciones que se deben cumplir para que esto pueda llevarse a cabo, ya sea en la 1ra. etapa -en la que se trabaja con estudiantes que no contaron con conectividad, situación a la que no se dio una solución en todo el año- como en la 2da. etapa, en la que se dará el regreso progresivo a las aulas. Dicho documento indica que el establecimiento educativo no retomará y/o suspenderá la actividad presencial si:

• no cuenta con agua para la limpieza del establecimiento e higiene personal, y agua potable para el consumo personal;
• hay baños de estudiantes y/o docentes clausurados (cabe aclarar que la normativa indica que debe haber 1 inodoro y/o mingitorio cada 15 estudiantes y un baño de personal por sexo); si no hay agua en los lavamanos o en las descargas de sanitarios; si hay pérdidas de agua que afectaran las condiciones de higiene; si hay pozos absorbentes, red cloacal o cámaras sépticas no operativas; si hay baños con inodoros, mingitorios o lavabos no-operativos;
• la red de gas no cuenta con llave de corte general; si no funciona la calefacción o esta es a través de aires acondicionados;
• el establecimiento no tiene electricidad; hay paredes electrificadas o problemas graves de instalación eléctrica;
• el edificio tiene un problema estructural, total o parcial, que provoca riesgos;
• la escuela se encuentra en obra, afectando toda la planta escolar durante toda la jornada;
• faltan elementos de higiene y limpieza y/o personal auxiliar en la escuela.

Como trabajadores, somos conscientes de que una gran cantidad de escuelas de nuestro distrito no cumple con algunos de los puntos arriba mencionados, como así también de que durante el 2020 no se han llevado a cabo las obras necesarias para poner en condiciones todos los edificios escolares. Tampoco se ha recibido, en muchos casos, el material necesario para cumplir los protocolos indicados para recibir a los estudiantes (termómetros, tapabocas, lavandina, etc.) y fue la comunidad educativa, una vez más, la que tuvo que poner dinero de su bolsillo para comprarlos y así poder abrir la escuela, tanto durante la entrega del SAE como en el mes de diciembre, al realizar la revinculación de algunos alumnos. Es decir, solo estarán en condiciones de empezar las clases aquellas escuelas que cuenten con todos los elementos y sin problemas edilicios. Sin embargo, una gran porción del estudiantado deberá continuar con clases virtuales (solo los que cuenten con medios para conectarse) vulnerando de este modo el derecho a la educación de los jóvenes y explotando a los docentes que deberán trabajar en un sistema mixto, multiplicando las horas laborales por el mismo sala-rio.

Por todo esto, creemos que es necesario que se realicen asambleas por distrito en conjunto con toda la co-munidad educativa para que realicen comités de bioseguridad que determinen las necesidades reales de cada establecimiento educativo.

Es imperioso que la burocracia deje de allanarle el camino al gobierno de Kicillof y convoque asambleas de afiliados y no afiliados que discutan y determinen el camino a seguir.

Que sea el conjunto de la comunidad educativa junto a los sindicatos los que le impongan al gobierno que se cumplan todas las condiciones de habitalidad y bioseguridad para el retorno.

Que se lleven a cabo todas las acciones estatutarias pendiente y se realicen actos públicos para que todos los cargos estén cubiertos (tanto docentes como auxiliares)

Que se creen los cargos que sean necesarios para que ningún docente se quede sin trabajo. BASTA de precarización laboral. Basta de planes como el PIEDAS y el ATR. Que todos los docentes sean designados estatutariamente.

En el caso de que la virtualidad siga, total o parcial, es imperioso que se garanticen los insumos tecnológicos para que se lleven a cabo, así también como la conectividad tanto para docentes y alumnos. De lo contrario se seguirá agrandando la brecha entre quienes pueden o no garantizarse así mismos estos recursos.

Vacunación universal inmediata!
Recomposición salarial urgente! Más presupuesto para educación!
Los docentes queremos volver a las escuelas, pero los responsables de garantizarlo no están haciendo su trabajo.

La Purpura en Suteba. El POR en educación.