El capital financiero quería otro desenlace de la crisis. Rechaza el nombramiento de Batakis porque la asocian al kirchnerismo
Esto quiere decir que van a seguir conspirando contra la economía y tratar de forzar al gobierno débil a que termine por aceptar sus exigencias. Esperaban que Fernández nombrara algún personaje vinculado a los “mercados”, hiciera las reformas, y rompiera con el kirchnerismo.
La especulación con el dólar negro, las importaciones truchas, la retención de las cosechas, no liquidar las exportaciones, amenazar por los medios de prensa que no le presten más pesos al gobierno porque esa deuda va a ser renegociada en el futuro, la remarcación desenfrenada o la falta de entrega de productos como autos o teléfonos celulares especulando con una devaluación, que se visualizaron en estas últimas semanas, son comportamientos que ya conocemos. No es que esperaban un “golpe de mercado”, son parte del golpe.
El diario La Nación es la expresión más consciente de esos sectores: “En Estados Unidos tomaron la llegada de Silvina Batakis… como un claro giro del Gobierno hacia el kirchnerismo, que pone en duda el programa con el Fondo, lo deja otra vez en las puertas del limbo y preludia un deterioro mayor en la economía”.
Ante la expectativa de un cambio de rumbo “Batakis pulverizó ese escenario… el mercado espera … un riesgo mucho más alto a un deterioro más profundo de la economía, con más inflación, más brecha y menos crecimiento, y una relación más difícil con el Fondo, donde Guzmán había tejido relaciones estrechas con el staff”. “Un informe del banco de inversión JP Morgan que circuló luego de la designación de Batakis dijo que el equilibrio de poder en el Frente de Todos se había volcado hacia el kirchnerismo, alertó por el riesgo a una hiperinflación y dijo que la Argentina se encuentra en una situación de “desequilibrio latente””.
Otra nota del banco de inversión Goldman Sachs, consideró que la salida de Guzmán puede verse como un “golpe político” contra el presidente Alberto Fernández y “puede comprometer la relación con el FMI”.
El diario Clarín también advierte que hubo un “golpe” del kirchnerismo que le impuso la ministra de economía y advierte sobre sus antecedentes aumentando impuestos o alentando a la suba de retenciones.
La pretensión de Massa, un hombre de la Embajada, de asumir como jefe de gabinete y tener el control total de economía y otros sectores, era lisa y llanamente pasar a un segundo plano a Alberto Fernández. Esta movida por ahora no prosperó, entre otras razones porque también era catapultarlo como candidato a presidente para el próximo año si su gestión mejoraba un poco la economía. Pero no está descartado. Massa considera que “hacen falta cambios profundos y de fondo”, sin decir cuáles, y que no acepta cambios “cosméticos”. Por ahora la apuesta es por Batakis con el apoyo de todo el kirchnerismo, la burocracia sindical y los gobernadores.
Esto no quiere decir, de ninguna manera, que la ministra Batakis sea antagónica con Guzmán, son caras de una misma moneda que parte de reconocer al FMI y la deuda y respetar la gran propiedad, aunque pueda parecer que aplican distintas medicinas. Esas cuestiones elementales son las que definen que no tiene margen para tomar decisiones firmes en defensa de las condiciones de vida de las masas.
(Nota de MASAS nº418)