Esta situación no se soporta ni un día más
Llamado a los sectores que se han destacado en la lucha en defensa del salario y los puestos de trabajo, a las organizaciones de desocupados que ganan las calles con sus reclamos:
Es urgente exigir a las centrales sindicales y a todos los sindicatos
INMEDIATO PARO GENERAL ACTIVO EN DEFENSA DE NUESTRAS CONDICIONES DE VIDA Y DE TRABAJO, COMO PARTE DE UN PLAN DE LUCHA PROGRESIVO
¿Hasta cuándo vamos a tolerar la suba indiscriminada de los precios de los alimentos y todos los productos esenciales, los aumentos del transporte y todos los servicios?
El gobierno está atado de pies y manos por los acreedores y los capitalistas más poderosos que lo quieren obligar a una mayor devaluación del peso que desatará otra espiral de precios que licuará más todos nuestros ingresos. Y no reacciona. No puede tomar ni las más mínimas medidas de defensa del interés nacional porque está sometido a los sectores más concentrados del capital. No se puede esperar nada de él. La situación se agrava día tras día y hay desabastecimiento en numerosos rubros. Las empresas empiezan a paralizarse esperando una resolución sobre la devaluación, lo que empieza a frenar la economía. Ya conocemos esta historia.
Los especuladores, los que saquean el país y nuestros bolsillos tienen nombre y apellido (los llaman “mercados”), es necesario tomar medidas inmediatas. No sirve retarlos con discursos, al gobierno se le ríen en la cara. No se puede esperar. Están en guerra contra la Nación y contra la gran mayoría cada vez más empobrecida.
El gobierno consulta con el FMI hasta las medidas más tímidas. ¡Basta! El acuerdo con el Fondo nos está enterrando. Las mesas de diálogo y concertación con los empresarios no sirvieron para nada, como también se sabía. El capital financiero, los grandes capitalistas, los terratenientes, quieren un ajuste más a fondo, ajuste contra las jubilaciones, contra los salarios, terminar con los subsidios para liberar las tarifas, más devaluación, quieren más entrega de los recursos y pagar menos impuestos de lo que pagan. No hay forma de conciliar sus intereses con los de la mayoría.
El rol de las centrales sindicales es de total sumisión, el llamado de Yasky a una marcha de antorchas es vergonzoso. Se debe convocar inmediatamente a asambleas en los lugares de trabajo, en los barrios, en las escuelas, para debatir el pliego de reclamos urgentes y las medidas de lucha, para formar los comités de huelga, de lucha, para organizar la resistencia, para imponer a las direcciones de la CGT, la CTA y la gran mayoría de los sindicatos que rompan la tregua con el gobierno y las patronales, deben independizarse, defender los derechos de la mayoría. Con los métodos de la clase obrera, con la huelga y la movilización hasta arrancar los reclamos y terminar con el puñado de parásitos que se fagocitan toda la riqueza.
* por un salario mínimo y una jubilación igual al costo de la canasta familiar, ajustado mensualmente;
* impedir despidos y suspensiones, por la incorporación a convenio de todos los trabajadores tercerizados, regularizar todo el trabajo informal;
* confiscar la producción agropecuaria, de los molinos y carnes, así como las grandes cadenas de supermercados, garantizando la distribución de alimentos en todos los barrios
* creación de los millones de puestos de trabajo que se necesitan, reduciendo la jornada laboral, incorporando nuevos trabajadores, con un verdadero plan de obras públicas que genere puestos de trabajo genuino, (casas, hospitales, escuelas, rutas, cloacas).
* Destinar todos los recursos necesarios para la fabricación de todo el material ferroviario para reconstruir la red ferroviaria; para construir los buques de la flota mercante, las dragas, y todos los equipos que se supieron producir en el país. Industrializando el país se crean los puestos de trabajo genuino que necesitamos.
Nos dirán que no hay recursos, que no hay financiamiento y tantas excusas. Los recursos existen sobradamente para resolver todos los problemas de la mayoría. Hace falta decisión política para imponerlas.
– Estas medidas exigen desconocer toda la deuda externa y romper todas las ataduras con el FMI, el Banco Mundial y los acreedores. Ahí está el corazón del parasitismo y la especulación.
– Requieren estatizar el comercio exterior para terminar con el contrabando, con el saqueo de nuestros recursos, para que todas las divisas ingresen al país. Para terminar con las importaciones truchas y suntuarias que esquilman las reservas, para terminar con las maniobras de sobrefacturación y subfacturación. Recuperar para el Estado todos los puertos y todas las vías navegables.
– Requieren terminar con la banca privada y desconocer todos los negociados con bonos que están generando un endeudamiento colosal. Integrar todo el sistema financiero en uno solo estatal, nacional.
– Requiere terminar con la gran propiedad terrateniente, expropiándola.
– Todas las empresas esenciales que fueron privatizadas deben ser reestatizadas.
Estas medidas elementales, democráticas, de defensa del interés nacional y de los trabajadores no será resuelta en el Congreso, ni será legalizada por la Justicia corrupta, será impuesta por la acción directa de masas. El único lenguaje que cabe es el de la lucha de clases, el levantamiento de la mayoría oprimida contra una minoría que tiene en sus manos toda la riqueza y quiere más. Cada vez más concentrada y monopólica. El capitalismo está agotado, en descomposición y no puede ser reformado.
Las organizaciones combativas, las que se reclaman de la clase obrera, antiimperialistas, deben poner en marcha una convocatoria unitaria. La burguesía está hundiendo el país, su tiempo se agotó.
Desde nuestro punto de vista, marxista, sólo la clase obrera acaudillando a la mayoría por medio de una revolución social puede dar una respuesta progresiva a la crisis preparándose para tomar las riendas del poder, única vía para terminar con estas crisis que nos empujan a la barbarie.
24-07-2022