Nuevas provocaciones del Gobierno

El martes 7 de febrero, en el marco de las 160.000 bajas que dispuso alevosamente el Ministerio de Desarrollo Social, a expreso pedido del Gobierno en la figura de Sergio Massa, la Unidad Piquetera nuevamente gana las calles con la consigna: “El FMI ordena, Tolosa condena”.

Buscando revertir la crítica situación en la que miles de beneficiarios se encuentran ante el avance inclemente de las políticas de recorte, de ajuste sobre el ajuste, las organizaciones sociales se manifestaron con bloqueos desde Buenos Aires (Puente Pueyrredón, el Puente La Noria, el Acceso Oeste, la Panamericana y la autopista Buenos Aires-La Plata) y por distintos puntos del país.

No solo han suprimido los programas “Potenciar Trabajo” gracias al cínico ardid de las auditorías virtuales que Tolosa Paz ratifica como “válido”. Ahora también privan a las organizaciones, en una evidente nueva avanzada, del necesario plus que reforzaba el Potenciar Trabajo, llamado “Nexo”, es decir otro medio salario (50% del mínimo vital y móvil). Ninguna contemplación frente a las dificultades en los servicios de telefonía celular y redes de internet, que dejan a miles de familias totalmente privadas de la posibilidad de realizar los trámites.

El martes 07/02 ninguna respuesta se escuchó de parte de la Ministra, mientras miles de damnificados daban cuenta del rigor estival a lo largo y ancho de la Argentina, con sendos cortes de ruta. La ausencia de Tolosa Paz en Desarrollo Social intentó ser reemplazada con una figura decorativa del Ministerio sin ningún tipo de posibilidades de arribar a ninguna solución real a los ya dilatados reclamos.

Mientras la ruindad de Alberto Fernandez llega a extremos indecibles, con sus inefables discursos de campaña, el “súper Ministro” Sergio Massa sigue a rajatabla los acuerdos con el FMI en esto de achicar “costos” del Estado (el déficit fiscal) por orden de los parásitos financieros norteamericanos. Esto está bien a la vista: la vil entrega de los recursos naturales, la re-primarización de la economía y la timba financiera, como norte instalado desde hace décadas, desde la última dictadura cívico militar, hasta hoy es el único modelo que llevan adelante estos impresentables personajes, inclaudicables demagogos, entregadores redomados al servicio de la causa imperialista.

Sólo podremos avanzar y vencer en férrea unidad con la clase obrera, movilizándonos codo a codo en cada conflicto obrero por suspensiones o despidos; ante cada reclamo en nuestros barrios; ante el ajuste eterno sobre los raquíticos bolsillos de los asalariados; ante el pago de la fraudulenta deuda externa que solo deja a su paso hambre y más precarización de las condiciones de vida de las masas oprimidas y explotadas… Sólo el proletariado, acaudillando al conjunto de los oprimidos, podrá imponer condiciones de vida digna a partir de la lucha por sus necesidades más sentidas y con la perspectiva de alcanzar sus intereses históricos como clase.

 

(nota de MASAS nº430)

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