Las PASO y el “programa” que unifique los frentes y alianzas

Los sectores más críticos del gobierno dentro del Frente de Todos repiten que más que una unidad electoral necesitan una unidad política para gobernar, necesitan un programa básico que unifique a todas las corrientes que lo integran. Dicen que de nada sirvió armar un frente electoral para impedir que ganara Macri y que después el gobierno gobierne de espaldas a sus votantes como ha hecho Fernández quebrando las ilusiones que se depositaron en él. Siguen tratando de tomar distancia del gobierno como si no fueran responsables de integrarlo.

Si no hay acuerdo programático no debieran ir en un frente o alianza, deberían presentarse cada sector por su lado. Hoy el acuerdo “programático” se limita a derrotar a Milei y a Juntos por el Cambio, “para que la derecha no vuelva”.

Aunque no lo diga, SI hay un acuerdo programático entre todos los sectores que conforman el Frente de Todos y que lo podríamos resumir en estos puntos:

1.- Las reformas neoliberales de Menem no se tocan;

2.- No se estatiza ni la banca ni el comercio exterior; no se recuperan los puertos y los ríos; no se recuperan todas las empresas de energía.

3.- No se toca la propiedad de la oligarquía terrateniente;

4.- No se levanta el secreto bancario, impositivo y bursátil, imprescindible para avanzar en la investigación del saqueo y fuga de divisas;

5.- No se desconoce la deuda externa ni el programa acordado con el FMI.

6.- No definen que el salario y jubilación mínimas deben alcanzar a cubrir lo que cuesta la canasta familiar.

7.- “El capitalismo es el sistema más eficiente y eficaz”. Ninguno cuestiona la explotación capitalista ni el capitalismo como un sistema agotado desde hace mucho tiempo y sólo puede asegurar toda clase de padecimientos a la mayoría.

Los sectores críticos consideran que un acuerdo “programático” debería incluir un aumento de salarios y jubilaciones, elevar la participación de los asalariados en el PBI, redistribuyendo el ingreso, mantener los planes sociales, entregar tierras para viviendas, controlar las importaciones… reformas que generan algún roce pero no cambian la esencia de un sistema que no se soporta más.

Asistimos a una derechización de los partidos y corrientes políticas del nacionalismo burgués, abandonan todas las banderas de soberanía política y económica, las banderas antiimperialistas, antioligárquicas. Junto con ellos se derechizan las corrientes stalinistas que forman parte del Frente de Todos. Son ellos los que se derechizan, no los trabajadores, no los oprimidos.

Frente a una situación de descomposición capitalista, de agudización de la guerra comercial, de saqueo de todos los recursos, de creciente militarización, se adaptan a las presiones del capital financiero y dicen que “la correlación de fuerzas no da”, “que los tiempos han cambiado”. Son ellos los que cambiaron, son ellos los que “no van más”. La desilusión y ruptura con estas corrientes es un signo de maduración, es progresivo. Es necesario romper con todos los frentes, alianzas y partidos que defienden el orden capitalista.

En nombre de derrotar a la derecha y la ultraderecha otra vez quieren hacer un amplio frente que tenga posibilidades de ganar elecciones y el programa no será diferente al que señalamos.

Por todo esto llamamos a no confiar en las elecciones como respuesta a nuestras necesidades. Solo podremos conquistar nuestros reclamos organizándonos y confiando en los métodos de acción directa.

 

(Nota de MASAS nº435)

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *