Reunión CGT-Gobierno de espaldas a los trabajadores, al salario, la jubilación y la pobreza
La CGT no puede ir a ninguna reunión con el Gobierno sin explicitar el pliego de reclamos urgentes de los trabajadores. No puede haber ningún secretismo. No debe integrar ningún organismo con las patronales y el Gobierno.
El jefe de gabinete Francos recibió a la dirección de la CGT encabezada por los secretarios generales Héctor Daer (Sanidad) y Carlos Acuña (Sindicato de Obreros de Estaciones de Servicio (SOESGyPE). En sus declaraciones no aparece que se haya reclamado ningún tema urgente de los trabajadores.
Acompañaron Jorge Sola (Sindicato del Seguro); Andrés Rodríguez (UPCN); Gerardo Martínez (UOCRA); José Luis Lingeri (Obras Sanitarias); Cristian Gerónimo (Sindicato de Empleados de la Industria del Vidrio y Afines, Seivara); Robustiano Geneiro (UTHGRA); Maia Volcovinsky (UEJN); Luz Marina Jaureguiberry (SADOP); Sergio Romero (UDA); Roberto Fernández (UTA); y Daniel Ricci (FEDUN).
Acordaron conformar una “mesa tripartita” (Gobierno, CGT y empresariado) para avanzar con diversos temas de la agenda laboral, así como la participación de representante de la CGT en la conformación del Consejo de Mayo que “va a tener tanto un integrante del sector empresario como un representante del sector sindical” que todavía no fue nombrado y “lo va a elegir el Poder Ejecutivo”.
Manrique del SMATA y Secretario Gremial de la CGT dijo: «Cuando vos te reunís en formas misteriosas es porque no tenés claro qué vas a discutir o lo que vas a discutir no lo podés decir». “No acepto que digan que se reúne la CGT. Se reúnen tres dirigentes, llevan el sellito pegado en la frente pero no representan nada. Es una CGT vacía de contenido”.
En los medios se dice: “retomaron el diálogo”, “las partes se encaminan hacia un diálogo más permanente”. ¿Qué se puede negociar con un Gobierno que declaró la guerra a los trabajadores?
La preocupación de la CGT: Daer sostuvo que la dirigencia sindical tiene “una preocupación muy grande que es por uno de los artículos de la Ley Bases que modifica el 242, que prevé el despido con causa en la ley de contratos de trabajo” con referencia a la posibilidad de echar a trabajadores a partir de la realización de bloqueos laborales. Daer sostuvo que se aspira a redactar la reglamentación del artículo 242 “acordando entre todos”. Pero no hay cómo acordar con las patronales y el Gobierno, son ellos los que pusieron este artículo en la Ley. El artículo debe ser eliminado.
Daer afirma tramposamente que “para la decisión de que se considere una toma o un bloqueo va a haber un tercer sector, que es una comisión tripartita o como sea, va a ser un órgano administrativo que va a decir si existe un bloqueo o no existe un bloqueo y no va a ser un tema discrecional”. Con lo cual se está posicionando en contra de los bloqueos. Reivindicamos los bloqueos que deciden los trabajadores, forman parte de los métodos de lucha de la clase obrera que reivindicamos.
Los burócratas anticiparon que solicitarán una entrevista al nuevo ministro de salud Mario Lugones, para abordar distintos temas como el financiamiento de los tratamientos de alta complejidad y la deuda del Estado con las obras sociales. Estos dos temas están estrictamente vinculados a la caja de las obras sociales sindicales. No es que les preocupa la “salud”, como dicen. Si así fuera lo primero que deberían reclamar es por los salarios de los trabajadores del sistema de salud, por el equipamiento y los suministros, por el presupuesto que no alcanza y que es reducido fuertemente por este Gobierno, por la necesidad de terminar con el sistema privado de salud.
El Gobierno les promete que no apoyará en el Congreso ninguna ley de “democracia sindical” como la que impulsan los radicales, que pueda molestar su control sobre el aparato sindical, a cambio de su pasividad, que dejen hacer al gobierno, que boicoteen toda iniciativa de lucha. Por orden de Santiago Caputo los legisladores de Milei sabotearon la reunión de la Comisión de Trabajo para tratar el proyecto de Ley. Andrés Rodríguez afirmó que cumplió el acuerdo con la CGT.
El Consejo de Mayo está basado en el Pacto de Mayo que concentra los principales lineamientos del programa del capital financiero, contrarios al interés nacional y a los trabajadores. La CGT no solo no debe ser parte sino que claramente debe combatirlo.
Los dirigentes que denuncian la actitud cómplice de la dirección de la CGT deben llamar a asambleas y plenarios en los lugares de trabajo, marcando el camino para que los trabajadores pasen por encima de los dirigentes burocráticos y seleccionen otra dirección, debatiendo el plan de lucha y todas las reivindicaciones de los trabajadores. La CGT se recupera desde las bases, con asambleas, plenarios, con un plan de lucha y un claro pliego de reivindicaciones.
(nota de MASAS n°466)