Una vez más el gobierno ataca la educación especial
El 13 de noviembre del corriente año llegó a todos los correos oficiales de las escuelas especiales e integrales de Neuquén, un documento titulado “lineamientos situados de la modalidad de educación especial”. En el mismo se ve plasmado con claridad un nuevo intento de implementar la reforma educativa, a la cual resistimos desde la aprobación de la resolución 1256/17. Básicamente lo que esta vez impone la directora de la modalidad, Karina Lamperti, es la vulneración de las condiciones laborales de todos los trabajadores de la educación especial de la provincia. Desde la dimensión organizacional de las instituciones, plantea tipos de agrupamiento de estudiantes y docentes:
● Para las sedes de las escuelas especiales, propone que los grupos “se conformarán con la cantidad mínima de 6 (seis) estudiantes por docente y cuando alcance la cantidad mínima de 9 (nueve) estudiantes, se podrá establecer la constitución de una pareja pedagógica intermitente o constante”.
● Mientras que para las sedes de escuelas integrales (EIAJD) “se conformarán grupos con la cantidad mínima de 9 estudiantes por docente y cuando alcance la cantidad mínima de 12 (doce) estudiantes, se podrá establecer la constitución de una pareja pedagógica intermitente o constante”.
● En la misma sintonía se ve cómo, aprovechando la modificación del nombre de las salas de severos trastornos de la personalidad (STP), ahora devenida en “construcciones subjetivas”, modifican también la cantidad de estudiantes por aula, estableciéndose “como mínimo de 6 (seis) estudiantes para conformar una dupla pedagógica, que puede ser integrada por dos docentes de educación especial o por un docente de educación especial y docente psicólogo/a. Y, en caso de no cubrirse uno de los dos cargos, “se configurará el apoyo temporal con un integrante del equipo de apoyo de la sede, garantizado la continuidad pedagógica del grupo clase”.
● A su vez, plantea que las maestras de inclusión (MAI) de las escuelas especiales tendrán un mínimo de cuatro estudiantes cuando sea de asesoramiento y un mínimo de 6, cuando sean de configuraciones de apoyo metodológicos. El gran problema es que aquí no se plantea el máximo de estudiantes a cargo por MAI, quedando ello a criterio de la dirección de la modalidad, de los supervisores y equipos directivos. Lo mismo sucede en los cargos MAI de las EIAJD: siendo un mínimo de 7 por docente.
● Al mismo tiempo, plantea que los equipos de apoyo se vean en la obligación no solo de ser docentes suplentes de las salas conocidas como de severos trastornos, sino que también, realicen quincenalmente reuniones con los padres de los estudiantes de educación temprana, que ahora van formar parte de todas las escuelas especiales de la provincia. Es decir, se le suman más funciones a su rol, pero sin incrementarse la cantidad de integrantes por equipo de apoyo por escuela.
Con todos los datos extraídos de esta última disposición, se observa cómo el gobierno intenta implementar, a como dé lugar una vez más, la reforma educativa en la modalidad, la cual se traduce en reforma laboral. Y lo peor de todo es que, bajo el lema de la “educación inclusiva”, a la que caracterizamos como una estrategia de inclusión-excluyente propia del capitalismo para no cambiar nada de forma radical, se socava el derecho a la educación de las personas con discapacidad, puesto que no respeta la singularidad de cada uno de los estudiantes, ni de los dispositivos educativos que los mismos requieren, ni de las instituciones con especificidad acordes para ellos. No es lo mismo tener una sala con cinco estudiantes con dupla pedagógica, a tener seis sin ella. Se ha luchado desde el gremio por la conquista de las duplas pedagógicas para nivel primario, y una vez que esto se logra, se reduce ese recurso humano en la modalidad, que es donde históricamente han funcionado. Hablan mucho de la educación, pero nada dicen de la creación de cargos que se viene exigiendo hace añares desde las distintas escuelas especiales, ni del edificio de la escuela especial n° 22, o la EIAJD n°3 de San Martín De Los Andes, solo por mencionar algunos ejemplos. A la cuestión edilicia, se suma que en la disposición se plantea que hayan “talleres de fortalecimiento de habilidades, con un máximo de 2 o 3 veces por semana en contraturno del horario escolar al que asiste el estudiante a la escuela de nivel o modalidad”. Estos talleres se proponen en escuelas especiales e integrales, con la imposición de aumentar la cantidad de estudiantes por sala para el siguiente año.
No es la primera vez que intentan flexibilizar las condiciones laborales de los trabajadores de la educación especial, afectando con ello al resto de los niveles educativos, pues es una modalidad que los atraviesa a todos. Se ha logrado resistir el anteproyecto de inclusión educativa en tiempos de Hadra Jadul como directora de la modalidad, así como también el borrador de una disposición de la directora Norma Alarcón en el que pretendía modificar las funciones de los trabajadores de sede de las escuelas especiales. Siendo este año el último intento de reforma laboral impuesto de forma autoritaria por la actual directora Karina Lamperti, impulsando el cambio de nombre de la modalidad (MAITED), la función, tanto de los equipos de apoyo, así como de los docentes como meros acompañantes y asesores. Este último intento se logró rechazar de conjunto a partir de la jornada unificada de las especiales realizada en el mes de mayo del corriente año, promovida por la comisión directiva de la seccional de ATEN Capital, ya que desde la conducción gremial a nivel provincial en manos del TEP, nada dijo al respecto. De hecho, son quienes trabajan en connivencia con los gobiernos de turno para llevar adelante la reforma educativa en la modalidad, a la que vilmente llaman construcción curricular, utilizando los conocidos mecanismos de pseudoparticipación y pseudodemocracia de las reformas de los niveles de educación superior, media e inicial.
El gobierno difunde esta disposición en el penúltimo mes del año, con dos huelgas a las que los docentes le pusieron el cuerpo en defensa de los salarios, del derecho a huelga y del régimen de licencias, con la profundización de la crisis económica a nivel nacional y provincial, y en donde las instituciones se encuentran atareadas con el cierre del ciclo lectivo, con la exigencia desde la dirección de la modalidad hacia los equipos directivos de las escuelas para que completen planillas brindándoles información de la cantidad de estudiantes por docentes en sede, y la cantidad de metros cuadrados que tiene cada aula donde está ese grupo. Todos estos datos van a ser funcionales para reducir las duplas pedagógicas en sede y aumentar la cantidad de estudiantes por sala, sin importar sus particularidades. La frutilla del postre de dicha disposición es que en la dimensión administrativa solicitan que en los formularios A para pedir cargos, deben colocar en la columna observación, “los días y horarios de los cargos turno E tanto de los docentes, como de los equipos de apoyo”. Se sabe que todos los trabajadores que se encuentran bajo esta situación de turno compartido (E), sufren la dificultad de acceder al doble turno, pues es muy difícil coordinar con los horarios de otra institución, quedando sujeto a la buena voluntad del directivo de turno para poder acomodar en un solo turno y así poder tener acceso a otro cargo.
Esta disposición ha generado en los trabajadores de la modalidad, rechazo e impotencia, el cual se tradujo en un voto bronca hacia el TEP, que se vio plasmado en las últimas elecciones de ISSN, donde en las urnas de los afiliados de educación especial, lo manifestaban sin tapujos y se evidenció en los resultados en apoyo a la lista Multicolor Bermellón e independientes. Es claro que los trabajadores saben que el TEP entrega nuestras condiciones laborales al elaborar las reformas educativas con el gobierno y el colmo de todo esto, llega al no decir una palabra frente a este nuevo atropello laboral. Consideramos que la Asamblea de Memoria y Balance es el momento oportuno para exigirle a la conducción provincial de ATEN que defienda la modalidad, que organice a la base generando un encuentro de todas las escuelas especiales e integrales de la provincia para rechazar de conjunto esta disposición que tiene como intención la flexibilización de los trabajadores de educación especial, el vaciamiento de las sedes de las escuelas especiales y principalmente la vulneración del derecho a la educación de las personas con discapacidad. Este avasallamiento se frena con unidad y organización, como vimos en la jornada unificada de las especiales convocada por comisión directiva de ATEN Capital. La fuerza está en nuestras manos, en la unidad, la organización y la lucha
(Nota de MASAS n°470)