masas-471

La dirección de la CGT en manos de las grandes corporaciones y el Gobierno

La CGT debe ser recuperada para los trabajadores

No estamos frente a cualquier gobierno, es un gobierno de guerra contra los trabajadores, para arrancar sus derechos, para hacer retroceder los salarios y jubilaciones, de precarización laboral, de cientos de miles de despidos, de apertura de las importaciones que destruirá buena parte del entramado productivo, de saqueo del país, de sometimiento incondicional al capital financiero. No hay nada que dialogar, su política debe ser derrotada lo más pronto posible, cada día que pasa incrementa el daño que hace. Es la representación de las grandes corporaciones nacionales y extranjeras, del capital financiero.

Sólo la clase obrera puede detener semejante ataque, acaudillando a la mayoría oprimida, con sus propios métodos de lucha, con sus organizaciones históricas.

El plan de lucha de la CGT de la primera mitad del año logró frenar ciertos ataques contra los sindicatos y limitar aspectos de la reforma laboral. Fue la lucha y no el diálogo lo que permitió poner ese freno.

Pero el golpe contra el poder adquisitivo de salarios y jubilaciones no se detuvo, la pérdida es extraordinaria al punto que cae el consumo de pan, leche, carne, yerba y medicamentos. El salario mínimo y la jubilación mínima han sido aplastados. La parálisis de la obra pública, los despidos en el Estado, la fuerte recesión, y la apertura de las importaciones deja cientos de miles de trabajadores en la calle. Se retomó el impuesto a las ganancias sobre los salarios, etc. Estos ataques del capital pueden materializarse por la falta de reacción del movimiento obrero organizado que no puede darse por satisfecho con los logros de los primeros meses.

No cabe duda que los trabajadores respondieron masivamente a todas las convocatorias de la CGT mostrando alta adhesión y combatividad, mostrando la voluntad de resistir a los ataques. Esto es lo que asustó al Gobierno, a la burguesía… y también a los burócratas. Saben que cuando los trabajadores entran en movimiento, crece su participación y politización, y pueden cuestionar sus sillones.

Debido a la crisis en la dirección de la CGT Octavio Argüello de Camioneros asumió en reemplazo de Pablo  Moyano. Hugo Moyano secretario general de Camioneros presentó al reemplazante y apoyó el diálogo con el gobierno desautorizando abiertamente las posiciones críticas de su hijo y sus llamados a resistir en las calles las políticas de Milei. Como otros dirigentes de gremios importantes.

El encuentro, que convocó a unos 40 gremios, se realizó en la sede de la Uocra donde se acordó dejar de lado cualquier tipo de medida de fuerza y priorizar el diálogo con el gobierno de Javier Milei.

Argüello reconoció que el ajuste del gobierno, al que calificó de “brutal”, perjudica en especial a trabajadores y  jubilados. Sin embargo, advirtió que “estamos en un momento del año donde tenemos que dialogar. Si después no hay una respuesta, habrá más medidas de fuerza, pero se necesita del acompañamiento de toda la sociedad”.

No sabemos cuáles son las presiones sobre Moyano y la obra social del sindicato, que fue motivo de orgullo para los trabajadores, para adoptar esta posición. Qué asamblea de los trabajadores avala esta posición. Las extorsiones y amenazas deben ser respondidas como se ha hecho en el pasado, en la calle, parando y movilizando. Sus bases chocarán con la política conciliadora de Hugo Moyano.

Héctor Daer también explicó la necesidad de desactivar las medidas de fuerza. “Toda acción tiene que acumular en algún espacio los frutos ¿No? Bueno, hoy no hay espacios que puedan construir una acumulación. Entonces, la confrontación en sí misma, si no tenés canalizado dónde acumular esa confrontación, no sirve de nada”. Dijo que Milei debería “entender que hay determinadas políticas de ajuste, que las tiene que cambiar, que no se pueden seguir sosteniendo”. Daer reclamó que se trate en el Congreso el Presupuesto 2025.

Para Daer la lucha de los trabajadores debe estar al servicio de algún proyecto electoral, si no, no sirve. A eso se refiere con los “construir una acumulación”. Los sindicatos y las centrales sindicales no fueron creadas para mediar entre las patronales, los gobiernos y los trabajadores.  No fueron creadas como soporte electoral de ningún partido. O son un instrumento al servicio de los trabajadores, de sus intereses más inmediatos y urgentes o son correa de transmisión del gran capital. Por eso, los sindicatos deben independizarse de las patronales, de sus gobiernos, de sus instituciones, de sus partidos.

¿Cómo pueden hablar de que no hay consenso en la población para medidadas de fuerza? Si todas las convocatorias tuvieron respuesta masiva. ¿Qué asambleas hacen para discutir con los trabajadores sus reclamos y el plan de lucha que hay que tomar?

Cuando hablan de “prudencia y la inteligencia para manejar los tiempos”, parece que se refieren a sus intereses personales, a sus negocios, a los acuerdos que tienen con los empresarios. Las necesidades de los trabajadores son urgentes. 

Estos dirigentes burocráticos deben ser pasados por encima por sus bases, imponiendo sus asambleas, sus plenarios, su organización, seleccionando nuevos dirigentes, a la altura de la lucha que es necesario dar.

(Nota de MASAS n°471)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *