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Cristina Kirchner contra el derecho a huelga

Se ha convertido en un encono personal, como terca muestra de desprecio hacia el conjunto de los trabajadores de la educación y de la salud, y, finalmente, una expresión que la pinta de cuerpo entero exponiendo sus inocultables rasgos reaccionarios. Cristina Kirchner volvió a posicionarse contra el derecho a huelga de los trabajadores estatales en una entrevista con Gustavo Silvestre.

Estamos en medio de una arremetida casi sin precedentes contra el derecho a huelga, asemejándose a períodos abiertamente represivos. Dos decretos han sido elaborados, expresamente orientados a impedir cualquier tipo de forma de utilización de la huelga, es decir, de nuestra herramienta histórica de lucha. Cristina Kirchner eligió colocarse del lado del Gobierno de Milei, tal como hizo Kicillof recientemente.

Queda notoriamente al descubierto que los decretos 70/2023 y 340/2025 no son un capricho personal de Milei sino una tentativa de toda la politiquería burguesa. En el ámbito de los trabajadores estatales se busca responsabilizar a los propios trabajadores por la política de desinversión y abandono de la salud y educación pública.

Aunque asfixiados por los bajos salarios y por la inestabilidad laboral (con alto porcentaje no registrado); agotados por el pluriempleo, por cargas laborales extenuantes y jornadas con muchísimos kilómetros entre un trabajo y el otro, son estos trabajadores los que mantienen en pie el sistema público de salud y educación. Su esfuerzo descomunal es el principal obstáculo para paliar el desfinanciamiento crónico y cada vez más profundo de los distintos gobiernos burgueses.

Sucede que los distintos gobiernos parten de la dócil subordinación a los planes del Banco Mundial y ahora del FMI, que exige destinar esos recursos al pago disciplinado de la deuda externa. Allí, y solo allí, deben comenzar a buscarse las causas de la destrucción del sistema público y estatal de educación y salud.

Causa asombro que en la citada entrevista, Cristina Kirchner haya comenzado intentando mostrar simpatía con los trabajadores del Garrahan, no percibiendo la contradicción. O quizás desconociendo rotundamente que los trabajadores debemos recurrir al paro, a la huelga y a las movilizaciones por la falta de respuesta a los más básicos reclamos.

Cristina Kirchner, se coloca irremediablemente en la trinchera reaccionaria. No por repetirlo hasta el cansancio deja de ser una tontería su demonización de los trabajadores que salen a exigir sus reivindicaciones con los métodos históricos que conocemos los trabajadores, hartos de la incapacidad de las instituciones de la burguesía y su incompetencia para satisfacer nuestros reclamos.

Finalmente -y para que nadie pueda sospechar de un fallido, o hacerse falsas ilusione- Cristina Kirchner dejó en claro en esa misma entrevista que no es posible no pagarle al FMI. Con esto revela que sea cual sea el Gobierno o la composición del Parlamento, los trabajadores tendremos que seguir confiando únicamente en nuestra acción directa.

(Artículo de Masas n°481)