El adiós a Lolin, la última Madre de Plaza de Mayo de Neuquén, un ejemplo de lucha, independencia política de los gobiernos y solidaridad de clase
A los 100 años lúcida como toda su vida, murió Lolin Riggoni, quien formara parte de Madres de Plaza de mayo del Alto Valle y Neuquén junto con Inés Ragni, Adelina Pons de Pifarre, Aisa Passarini de Peralta, Josefina Lepori de Mujica, Zara Maritana Dehai de Arrazola, Feliciana Alcampan de Pichulman, entre otras.
Lolin siempre planteó que no solo buscaba a su hijo Roberto, quien fuera secuestrado y asesinado en el año 1977, sino que su búsqueda era por los 30 mil, por ello militó hasta último momento y se alegró cuando recibió la noticia del nieto 147, un hijo de desaparecidos oriundos de la ciudad de Cutral Có.
Los organismos de DDHH en la Argentina han cumplido un destacado rol en la resistencia a la dictadura, sobresalieron por la valentía de madres de hijos de desaparecidos, muchas de ellas eran amas de casa que no participaban en política pero que dieron enormes pasos a comenzar a descubrir que no era un problema individual sino un plan sistemático por parte del Estado. Entre las organizaciones encontramos en la región a Madres, la APDH e H.I.J.O.S.
Las madres de Neuquén, y entre ellas Lolin, se destacaron por convertirse en una gran referencia para todas las luchas de la región, además de convocar a enormes marchas cada 24 de marzo, movilizaciones que ellas encabezaban bajo distintas consignas ligadas a la coyuntura política como ocurrió cuando se pronunciaron contra el pago a la deuda externa. Se destacaron por mantenerse con independencia política de los gobiernos, del Estado nacional y provincial lo que las llevó a distanciarse de los grupos de DDHH que fueron cooptados por el kirchnerismo. Su independencia política les permitió pronunciarse frente a las diferentes luchas de la región, como lo hicieron con Zanón. Una de las tantas acciones fue escribir una carta dirigida a la comunidad que iba adentro de cada caja de cerámicos llamando a apoyar la pelea por los puestos de trabajo. Así como también estuvieron en primera línea en la represión a los desocupados en el oeste neuquino, por ello y por innumerables acciones se convirtieron en una palabra de autoridad en la región. Su independencia política les permitió poder actuar sin sectarismo, es por ello que su partida y su recuerdo es sin reparos.
Desde el POR somos conscientes que solo habrá justicia cuando terminemos con el capitalismo y su dictadura del capital, hoy en una de sus expresiones más nefastas. Por eso llamamos a las nuevas generaciones a tomar la lucha por verdad y justicia que sigue vigente.
(Artículo de MASAS n°486)