¿Cómo construir la unidad sindical, de los trabajadores?

Varios son los debates que atraviesan a la vanguardia, sobre cómo resistir al ajuste, y cómo superar a las burocracias sindicales, cuyo rol ha quedado aún más evidenciado por la voracidad capitalista.

Como partido entendemos que no se puede dar una respuesta mecánica. Los sindicatos son frentes únicos naturales donde los trabajadores pertenecen a distintos partidos o tendencias políticas. Por ello la cuestión de la unidad excede a las organizaciones de izquierda e implica a todos los sectores antiburocráticos y combativos. Estamos hablando de unidad para la lucha. Tampoco restringimos la unidad a la formalidad de si son afiliados o no al sindicato, sin son registrados o no. Y no debe mezclarse con los acuerdos, compromisos o frentes para elecciones.

El debate incluye cuestiones programáticas pero también de método, sobre cómo funcionan esos organismos que generalmente están activos cuando hay huelgas. Por nuestra experiencia la base más democrática para construir la unidad son direcciones sindicales que estén dispuestas a construirla, con los delegados y activistas organizados en cada sector. En la Coordinadora del Alto Valle (2001) la mesa que coordinaba estaba conformada por el Sindicato Ceramista, ATEN Capital, ATEN Centenario, la junta interna del hospital Castro Rendón, y organizaciones de desocupados, entre otros. Nadie cuestionaba a qué organización política pertenecían, las direcciones sindicales estaban allí representando a los trabajadores que los habían votado, y su mandato estaba dado por su programa y por la asamblea de trabajadores. Además se realizaban plenarios abiertos a todos los trabajadores.

En la actualidad en ATEN existen dos frentes opositores a la burocracia del TEP, el frente Multicolor que dirige Zapala, Picún, las minorías de Capital, Cutral Co y Plaza Huincul y Plottier, conformada por distintas agrupaciones, y los compañeros del frente Bermellón que no dirigen ninguna seccional pero que también está conformada por distintas agrupaciones, dirigido por la política del PTS (La Negra) y de la Rosa.

La propuesta de unidad de ambos frentes, que hace la Bermellón, para el funcionamiento, es estéril, no sirve para actuar frente a la realidad y mucho menos para dirigir un sindicato. La discusión donde las corrientes, en un debate,  argumentan cuánto han crecido o lo valioso de sus militantes, no puede desembocar en acuerdos, quizás todos tengan sus razones de acuerdo a qué tipo de organización construyan. La base de la unidad para la lucha deben ser la plataforma de reivindicaciones y las medidas de organización y lucha que se acuerdan y la táctica para recuperar el sindicato.

En el último tiempo estas diferencias se han acentuado porque el frente Bermellón se ha adaptado al discurso del gobierno y la burocracia acatando la orden de no dar la lucha en las calles. Mientras que el frente Multicolor ha estado desde el primer día en las calles. Si una parte de la base esta temerosa por la actitud de la burocracia,  del trabajo de los medios de comunicación y de la represión ejercida por el estado, el rol de las direcciones combativas no es adaptarse sino encontrar la forma de dar la pelea. Sólo para citar un ejemplo hablaremos aquí  del lunes 13 de julio donde, frente a una convocatoria de la Multicolor a movilizarse, la burocracia convocó a un acto por ZOOM. El lector se preguntará: ¿qué hizo el PTS? Pues bien, por más increíble que parezca, el PTS llamó a no marchar para asistir al acto de la burocracia, mientras que la Multicolor junto a la seccional Chañar marchó y desde allí se conectó.

Podríamos preguntarnos: ¿por qué el PTS cambió su posición y no reconoce los sectores de dirección de la Multicolor y entre ellos el rol que juega la minoría de Aten Capital en esta lucha claramente indicada como la oposición a la burocracia? Por oportunismo, porque no dirigen ningún sindicato. Llamamos a los compañeros de la Bermellón a reflexionar sobre sus intervenciones, sobre su política y a construir fraternalmente la unidad necesaria para expulsar a los burócratas del sindicato.

Por último siendo un tema complejo y de importancia para nuestra realidad seguiremos con este debate en la prensa en otros artículos.

(nota de MASAS nº 375)

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