Bolivia: La clase obrera consciente no mendiga
NO SE BAJA LOS PANTALONES ANTE EL PATRÓN, NI SUS GOBIERNOS, EN ESTE CASO EL GOBIERNO DEL M.A.S.
EXIGE E IMPONE EL RESPETO A SUS DERECHOS PORQUE ENTIENDE QUE PRODUCTO DE SU TRABAJO ES LA RIQUEZA QUE EL PATRÓN SE APROPIA
El Ejecutivo de la COB, Juan Carlos Guarachi, ha pedido, que “de una vez” se instaure Juicio de Responsabilidades contra exautoridades por el “golpe de Estado” que, en la versión del MAS, habrían perpetrado para derrocar al gobierno de Evo Morales
Inmediatamente, por las redes sociales, le han hecho recuerdo que él, a nombre de la COB, pidió la renuncia de Evo y que no movió un dedo para defender al gobierno masista de Evo Morales. “Compañero Presidente, si hay necesidad de que renuncie para pacificar, renuncie Presidente” (Conferencia de Prensa, Juan Carlos Guarachi, 10 -11- 2020)
Pero no fue sólo eso, buscó congraciarse con el gobierno provisional de la pitita Añez. El Gobierno de Añez, mediante resolución del Ministerio de Trabajo, reconoció la ampliación del mandato de Juan Carlos Guarachi y su Comité Ejecutivo al mando de la Central Obrera Boliviana (COB) hasta el 2022.
Como Guarachi, actualmente toda la burocracia sindical obrera es la encarnación del más vergonzoso oportunismo frente a los gobiernos burgueses de turno, producto de su servilismo al poder burgués. No representan para nada a sus bases, son unos arribistas, agentes de la burguesía, en busca de encaramarse en el aparato del Estado burgués para disfrutar de las prebendas que la burguesía otorga a sus sirvientes cuando le son fieles.
Las direcciones sindicales fabriles no sólo que no mueven un dedo frente al drama de los despedidos y los cierres de fábricas, sino que desalientan cualquier intento de unificar la lucha y recurrir a la acción directa para exigir al gobierno que resuelva su situación, con el argumento falaz de que es mejor tener buenas relaciones con el gobierno para lograr la atención a sus demandas por la vía legal.
En el sector minero estatal, la burocracia sindical ha institucionalizado la política del sinvergüenza Pedro Montes de “bajarse los pantalones” ante el “revolucionario” gobierno del MAS, para mantener en agónico funcionamiento la mina, en vez de exigir el fortalecimiento de la COMIBOL con inversión estatal para su desarrollo, frente al entreguismo del gobierno masista consistente en el incentivo a la inversión privada.
(Masas nº 2637 – POR Bolivia)