Elecciones en el SUTNA
El SUTNA es el sindicato argentino del neumático, agrupa a los trabajadores de las empresas: FATE, Bridgeston, Firestone, Perelli y los talleres dispersos por toda la Capital Federal. Cuenta en total con cerca de 3500 afiliados divididos entre las plantas de Merlo, San Fernando, Lavallol y Córdoba. Se encuentra agrupado nacionalmente dentro de la CTA, muy mayoritariamente de trabajadores estatales. Hasta el año 2016 fue dirigido por La Violeta, un sector de la burocracia peronista que ocupó la dirección desde el año 2000. Completamente alineados a Hugo Yasky, se integraron al gobierno durante la década kirchnerista y ocuparon el papel de representante de las patronales multinacionales durante todos sus mandatos. Incluso se los acusa de desviar fondos del sindicato para la campaña presidencial Scioli-Zaninni. Su principal dirigente, Pedro Wasiejko, actualmente ocupa el puesto de Presidente en el Astillero Río Santiago, responsable de impulsar la privatización y entrega de la industria naval, anteriormente estuvo a cargo del puerto de La Plata. Durante todos sus años de mandato, los trabajadores estaban impedidos de enfrentar despidos, paritarias a la baja, exigir condiciones de higiene y seguridad, participar de asambleas y organizarse desde las bases en el sindicato.
En 2016 fue recuperado de manos de la burocracia de La Violeta por un frente político formado por todas las corrientes de izquierda que intervienen en este sector: PO, PTS, PRC y otros activistas políticos. En aquella oportunidad el triunfo nacional de este frente fue muy ajustado, se impusieron por sólo 100 votos de diferencia con La Violeta y no pudieron recuperar todas las seccionales, de hecho, la burocracia retuvo varias.
Este proceso comenzó por la Seccional FATE de San Fernando (zona norte del gran Buenos Aires) que es la planta más grande e impuso a Alejandro Crespo como secretario general. Durante años esta seccional representó para los trabajadores la oposición a la burocracia e implementó formas democráticas de organización. Las principales conquistas se consiguieron gracias al impulso de lucha surgido desde San Fernando.
La burguesía industrial de conjunto venía presionando fuertemente al gobierno para imponer en todos los sectores los llamados “Preventivos de crisis” que pretendían imponer despidos masivos y suspensiones.
Como muchos otros sectores, los trabajadores del neumático resistieron como pudieron esta política patronal. Con movilizaciones, asambleas, paros, lograron frenar esta política que pretendía ser impuesta en la planta FATE donde peligraban más de 480 puestos de trabajo.
Del 26 al 28 de octubre pasado se realizaron las primeras elecciones generales desde que el Sindicato fue recuperado. Cualquier elección sindical implica que se realice un balance autocrítico del papel que se cumplió como dirección y que se evalúen cuidadosamente las posibilidades que tiene la burocracia de recuperar su fuerza. El problema de la unidad es central. En este punto se generó al interior del activismo del SUTNA una discusión importante, que fue volcada previo a las elecciones, a través de los periódicos de los principales partidos de izquierda que intervienen en el sindicato.
A nivel nacional se presentaron dos listas: La Negra (PO) y La Violeta (burocracia). En estas elecciones no se sostuvo el frente político que recuperó el Sindicato, por su parte el PO dice haber convocado a la unidad y a formar una lista única; el PTS, PRC y MAS acusan a PO de ser autoritario, antidemocrático y ofrecer a los delegados que no son de PO puestos menores dentro de la Lista, denuncian que la comisión directiva no se reunió durante meses y critican las conquistas de este año por insuficientes. Con todos estos argumentos impulsaron la presentación de dos listas clasistas en la seccional San Fernando. La Negra (PO) y el frente Roja (PRC)-GRANATE (PTS)-MARRON (MAS). En esta planta hubo 5 listas en total incluyendo a la burocracia y otras dos listas impulsadas por la patronal.
Una especial reflexión en este proceso implica la cuestión de la unidad frente a la burocracia. Esta es una discusión frecuente entre los activistas clasistas en todos los sindicatos. Es lamentable el papel cumplido por el frente ROJA-GRANATE-MARRÓN en la seccional San Fernando, terminaron incluso por debajo de la lista de la burocracia, por la confusión y divisionismo que generan. Si bien no se pueden desconocer sus denuncias, frente a la posibilidad de un fortalecimiento de la burocracia sindical es una responsabilidad política retirar una Lista que atenta contra la unidad y continuar dando internamente una lucha política feroz por imponer la democracia sindical, el funcionamiento regular y la modificación de los estatutos redactados por la burocracia.
Como Partido vemos que esta es una política frecuente de las corrientes políticas que integran el FIT-U, forman parte del mismo frente político a nivel nacional para las elecciones burguesas, pero son incapaces de concretar esta misma unidad en los lugares de trabajo.
Los resultados de las elecciones fueron contundentes, la burocracia sindical a pesar de la enorme campaña que hizo fue duramente derrotada, el 70% de los trabajadores votó a la Lista Negra, todas las seccionales fueron recuperadas, las listas de la patronal tuvieron menos del 10% de votos. Saludamos este proceso y reivindicamos recuperar los sindicatos de manos de la burocracia sindical, consideramos que esto pone en mejores condiciones al conjunto de la clase obrera para enfrentar la política de ajuste que la burguesía pretende imponernos.
¿Qué se puso en debate en las elecciones del SUTNA? Cómo resolver todas las acusaciones y diferencias que se plantearon entre las corrientes que intervinieron. Con qué métodos construimos las listas clasistas en los sindicatos, sobre todos en aquellos que han sido recuperados de manos de la burocracia.
Para recomponer la democracia sindical es necesario generar previo a las elecciones plenarios de activistas y delegados para poder discutir abiertamente un balance de la dirección saliente y construir la lista con todos los delegados que participan activamente, antiburocráticos probados. Ese es el ámbito donde debatir el programa de la lista y un plan de trabajo. Esta es la responsabilidad que tenemos los revolucionarios. Debemos desterrar el funcionamiento de aparatos que destroza la democracia sindical, que son un impedimento para sellar la unidad y objetivamente puede fortalecer a la burocracia.