La justicia burguesa protege a los terratenientes y encarcela a los mapuches
Cuando se conoció el chat de los jueces que viajaron a la estancia de Joe Lewis, el magnate que tiene casi 12 mil hectáreas en el sur que incluye un Lago al que no hay acceso público y un pueblo casi cercado, uno de los aspectos que quedó al descubierto fue la mención a: “limpiemos un mapuche” junto a burlas en referencia a las autoridades políticas y religiosas mapuches como la de logko y de machi. A esto se suma que la fiscal Etchepare, con quien Mahiques dijo que acordó el envío de la causa a Comodoro Py, es la misma que solicitó a la jueza Silvina Domínguez el desalojo de la comunidad Lafken Winkul Mapu en Villa Mascardi. Todo este escándalo ocurre a pocos días de haberse cumplido dos meses del desalojo de una recuperación de 4 hectáreas por parte de la comunidad.
En este marco, este martes 13 de diciembre se convocó a una conferencia en Buenos Aires para exigir que el presidente o la vicepresidenta reciba a la comitiva de autoridades mapuches que viajaron desde la cordillera. Esta comitiva exige la liberación de las cuatro mujeres mapuches que siguen presas. Recordamos que fueron desalojadas violentamente el 4 de octubre, llevadas a Buenos Aires y luego una de ellas tuvo que parir en condición de presa, y que el resto se encuentra con sus hijos pequeños, entre ellas la machi Betiana. Esta acción fue impulsada por un encuentro que se hizo en Bariloche con representantes de varias comunidades.
Los dichos de estos personajes corruptos en el chat dejan al descubierto lo que las comunidades vienen denunciando: la persecución sistemática de las comunidades mapuches que se organizan y recuperan tierras. Aunque estas recuperaciones sean mínimas en comparación con las hectáreas de las que son dueños los Lewis, los Benetton, los Tompkins y los Angelini, entre los más conocidos.
El modus operandi que viene realizando la clase dominante es el espionaje a las organizaciones políticas y sociales, luego la represión y el encarcelamiento para generar causas judiciales, como en el caso de las lamgen (hermanas), o del Lof Cayunao, entre otros, porque son innumerables las causas judiciales abiertas. Por ello es fundamental mantener una campaña unitaria por la liberación de las presas políticas mapuches y por la restitución de las tierras.