Comienza el segundo turno electoral: Chaco y Santa Fe

A tan solo un mes de las PASO nacionales tuvieron lugar los segundos turnos provinciales en Santa Fe (10/09) y Chaco (17/09). En ambas los ganadores fueron las listas de Juntos x el Cambio (JxC) frente a los candidatos de Unión por la Patria (UxP), lo que muestra un intento de castigo a los oficialismos a través del voto. La fallida estrategia inicial de varios gobernadores fue la de desdoblar las elecciones nacionales con las provinciales, reconociendo implícitamente que el fracaso del Gobierno Nacional podía llevárselos puestos a ellos mismos. En Chaco y Santa Fe, aun tomando esas previsiones, los oficialismos no lograron retener el mando.

El fenómeno más importante de la primera mitad electoral fue indudablemente el alto abstencionismo electoral que se generalizó y logró trasladarse hasta las PASO del 13 de agosto. La burguesía tomó nota del verdadero problema que es el instintivo hartazgo o descontento con las elecciones, y hasta un rechazo a creer que un voto puede darle un giro a la situación personal. Hemos visto desde entonces ríos de tinta llamando a votar, a defender los “40 años de democracia”, a convertirnos en dueños del destino del país.

En Santa Fe hubo un aumento de casi 100 mil electores respecto a las del 2 de julio, alcanzando una participación del 68%. Este porcentaje continúa por debajo de sus mínimos históricos, por lo que no pueden cantar victoria aún. Con estos números, las cuatro fuerzas que presentaron candidato a Gobernador lograron aumentar sus votaciones: Pullaro de JxC 70 mil votos más; el peronismo provincial con Lewandowsky 120 mil más; La Libertad Avanza 40 mil más; y el Frente de Izquierda (FIT-U) casi 25 mil votos más. Pullaro logró, de esta forma, alcanzar el 58% de los votos y marcar una enorme distancia de 500 mil votos frente a Lewandowsky (30%).

En Chaco votó el 72%, lo que implica también casi 100 mil votos más. Los titánicos esfuerzos de Capitanich (UxP) por mostrarse comprometido con la investigación del asesinato de Cecilia y la gigantesca red clientelar desplegada, no evitaron la dura derrota después de 16 años de gobiernos peronistas provinciales. Leandro Zdero, del riñón de la UCR dentro de JxC, sumó 90 mil votos más y superó el 45% necesario para ganar en primera vuelta, evitando el balotaje, algo con lo que especulaba Capitanich.

Un hecho importante que quedó demostrado con estas elecciones gira alrededor de La Libertad Avanza. Con los resultados de estas dos votaciones confirmamos que el fenómeno del 13 de agosto con la victoria de Milei es un fenómeno que se circunscribe esencialmente a su figura. Cuando sus armados provinciales no están acompañados del candidato a Presidente en las boletas obtienen votaciones marginales como logramos ver en las 18 elecciones provinciales, previo a las PASO nacionales. Bodoira, candidato de “Viva la Libertad” en Santa Fe no logró obtener el respaldo de Milei y cosechó 110.000 votos, muy lejos de los 650 mil que obtuvo Milei menos de un mes atrás. Algo similar ocurrió en Chaco con Alfredo “Capi” Rodríguez quien lanzó sus spots con motosierras y anunciándose como “Somos MILEI en Chaco”. Evidentemente esto no alcanzó y terminó con un magro 3.43% (de 180.000 en las nacionales a 23.000).

Por el lado del centrismo electoralista, vemos que han conseguido una buena elección en Santa Fe con su candidata a Gobernadora y una muy mala elección en Chaco. No resulta novedoso algunos eventuales aumentos y retrocesos en sus votaciones, pero que de ninguna manera deben tomarse como penetración de las ideas revolucionarias en las masas. El carácter del FIT-U se revela en la intervención socialdemócrata que llevan adelante, interviniendo exactamente al revés de cómo intervenimos los revolucionarios, lo que implica un evidente obstáculo en la politización de las masas. Le corresponde exclusivamente al POR llevar adelante el arduo debate con los honestos militantes y simpatizantes que depositan en la conquista de una banca, sus más altos anhelos, en su incomprensión del papel de los revolucionarios en las elecciones y los parlamentos.

Los revolucionarios debemos seguir bien de cerca el desarrollo de estas elecciones porque son una forma de auscultar el humor de las masas y cómo puede ir desenvolviéndose, incluso encauzándose a caminos electorales. Durante la primera etapa nos permitió ver la profundización de la tendencia abstencionista y pronosticar los resultados nacionales. Los marxistas utilizamos las elecciones para propagandizar nuestra estrategia revolucionaria, desenmascarando los falsos caminos institucionales y politizando a las masas en cuanto a los métodos de acción directa. Continuamos interviniendo con este método, con este programa y con estas ideas.

(Nota de MASAS Nº442)

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