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Milei veta la ley de jubilaciones aprobada en el congreso

La jubilación mínima debe equivaler al costo de la canasta familiar

Una crisis importante explotó esta semana con dos derrotas legislativas para el Gobierno, una el rechazo a la ampliación de gastos de la SIDE por 100 mil millones de pesos, la otra la reforma jubilatoria.

El mayor recorte del gasto del presupuesto han sido los haberes jubilatorios para buscar un superávit fiscal. El retroceso del poder adquisitivo de jubilaciones y pensiones es extraordinario. La contrapartida de ese brutal ajuste ha sido la rebaja del impuesto al patrimonio para los más ricos. Se ha producido una brutal transferencia de ingresos a favor de las empresas más poderosas que ajustaron sus precios y sus tarifas, que fueron liberadas por el Gobierno, mientras que se aplastan los ingresos populares.

El proyecto, aprobado en gran mayoría por todos los bloques de la Cámara alta, incluido el PRO (61 votos a favor y 8 en contra) representa una actualización mensual en base al último dato disponible del Índice de Precios al Consumidor (IPC), e incorpora una compensación extra del 8,1%.

El presidente Milei tras la sanción en el Senado reconfirmó que vetará la norma y la calificó como “un error perjudicial para los argentinos… nos parece una irresponsabilidad del Congreso hacer algo así, que estaría condenando a los argentinos de cara al futuro sin remedio”.

También dijo una sarta de tonterías como ya es habitual: “Vamos a plantearle a la sociedad la inconsistencia de lo que está planteando el Congreso. Si quieren hacer esto, que dejen en claro cómo lo van a financiar. Yo les digo, este incremento de 62 puntos del PBI de deuda, es decir, 370 mil millones de dólares que es lo que verdaderamente está costando esta medida, esto se paga con pobreza, con menos crecimiento”.

Adorni agregó la muletilla de siempre: “El equilibrio fiscal es absolutamente innegociable”.

La Oficina de Presupuesto del Congreso calcula que la nueva fórmula solo implica un mayor gasto del 0,45% del PBI en el año. Se desconoce cómo Milei llega a las cifras estrafalarias que declara, solo para confundir a la población.

Plata hay, la tienen los grandes capitalistas a los que se les redujeron impuestos, los que contrabandean las riquezas del país, los que evaden impuestos y son perdonados con los blanqueos, la que se lleva el imperialismo por medio de la deuda y sus intereses. Claro que hay recursos para financiar las jubilaciones y mucho más, lo que no hay es voluntad política porque sólo se busca satisfacer los reclamos del FMI y las grandes corporaciones.

Milei miente también cuando dice que las jubilaciones “se incrementaron en términos reales” 5% respecto de Noviembre. ¿Cuál será la “realidad” del Presidente? La única realidad son los precios y tarifas, son los alquileres y las expensas, es el precio de los remedios y del transporte. ¿Qué otra realidad puede conocer el 90% de los jubilados? El cálculo matemático es sencillo, comparar el índice de precios al 31 de julio y al 1 de Diciembre, del 135%, con los ajustes de las jubilaciones en el mismo período:

¿Cuánto cobraba un jubilado en diciembre 2023?: “Las jubilaciones mínimas, con el nuevo reajuste, quedarán en $105.713, y ese es el valor que casi un 65% de los titulares del régimen general percibirá mensualmente”. “El organismo previsional también dará un bono adicional … para los haberes más bajos. Se trata de un refuerzo económico de $55.000 destinado a los 5,5 millones de titulares de jubilaciones y pensiones que cobran hasta un haber mínimo”. (Diario LN). Sumando así $160.713

“En el mes de julio de 2024, sumado el bono de $70.000, la jubilación mínima de julio de 2024 será de $285.622”. El ajuste fue de 77,7% = $124.909.

¿De cuánto debería ser la mínima para mantener el poder adquisitivo del 1° de Diciembre? $377.676.

O el Presidente miente impunemente o es un ignorante, o ambas cosas al mismo tiempo.

La sanción de la Ley generó a su vez un quiebre en el PRO, ocho de los nueve senadores de su bloque acompañaron el cambio de sistema jubilatorio.

Milei convocó de urgencia a Macri a Olivos luego de que el PRO votara contra los fondos para la SIDE. Las declaraciones de Macri y el comunicado del PRO posteriores a esa reunión generaron numerosos rechazos en sus filas afirmando que “el partido ratifica que no avala un incremento del gasto previsional sin un financiamiento genuino… Comprometer el superávit fiscal no es una opción. Por lo tanto, consideramos que el presidente debe vetar la ley aprobada”.

Bullrich critica a Macri desde el gobierno: “Está mal mandar a los senadores del PRO a votar a favor de un proyecto fiscalmente irresponsable y después públicamente salir a decir que está en contra. Usan a los senadores como carne de cañón y atentan contra el plan económico del gobierno que dicen apoyar. Estás de un lado o del otro”.

Los partidos patronales no se pronuncian sobre toda la pérdida del poder adquisitivo de los jubilados en los últimos 10 años y cómo se recupera, la ley sólo refiere a la pérdida del último período y sólo parcialmente. Tampoco se pronuncian sobre cuál debe ser el mínimo que debe percibir un jubilado.

El veto a la Ley tendrá que ser tratado por el Congreso de la Nación. Si el veto es rechazado, el Gobierno amenaza con ir a la Justicia para impugnar la decisión. Esta es una puja entre fracciones patronales que no tienen interés verdadero en resolver las jubilaciones, por eso nada hay que esperar de ese enfrentamiento que sólo pone a la luz la miseria capitalista. No olvidamos que muchos de estos legisladores son los que votaron la Ley Bases de saqueo de la nación. Siempre debemos confiar en la lucha de los trabajadores para imponer el salario y la jubilación que corresponde que es lo que cuesta la canasta familiar, hoy en $1.500.000.

(nota de MASAS n°463)

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