En Bolivia son las grandes empresas capitalistas extranjeras las que se frotan las manos por la guerra Rusia-Ucrania
MINERÍA
Considerando que en el último lustro se revertió el orden de importancia de sectores que generan ingresos al país, hoy en día del conjunto de exportaciones el 53% corresponde al minero, 28% al de hidrocarburos y el 19% al agroindustrial y manufactura.
En la minería el Oro ocupa el primer lugar con el 43%, Zinc 24%, Plata 19% y el Estaño 9.6%, de los cuales, en cuanto a valor de las exportaciones, son las privadas transnacionales los responsables del 48%, 45% las cooperativas y el Estado (COMIBOL) sólo controla el 6%.
De las ganancias extraordinarias que obtienen, por ejemplo, de 1.000 millones de dólares exportados por San Cristóbal (Sumitomo) sólo dejan como regalías 40 millones y 40 millones por impuestos, haciendo sólo un 8% dejados en el país. Las cooperativas que, de 1816, 1400 se dedican a la extracción del oro donde los gruesos capitales chinos, brasileros, peruanos, colombianos se camuflan como asociación de socios cooperativistas. De 2540 millones de dólares exportados el 2021 sólo dejaron 68 millones de dólares por regalías (2.7%) y 25.4 millones de dólares por impuestos (1%).
Por la crisis sanitaria del COVID y ahora la guerra, el precio de los minerales se encuentran por las nubes (ejemplo: el Zinc de 0.9 $us. la LF a 1.7 $us., el estaño subió de 6 $us la LF a 22 $us). Y son estas grandes corporaciones mineras a nivel nacional las que se están forrando los bolsillos como nunca antes, saqueando inmisericordemente nuestras riquezas naturales.
HIDROCARBUROS
En el 2021 las exportaciones por el gas ascienden a 2.241 millones de dólares y las importaciones 2.120 millones de dólares que el Estado eroga en importar gasolina (620 millones de dólares) y diesel (1.500 millones de dólares). La diferencia 121 millones que demuestra que el beneficio para el erario nacional es muy reducido.
Las transnacionales socias de YPFB (Petrobras, Repsol, Total, etc.) son las principales beneficiadas en este rubro porque reciben de lo que exportamos. También los agroindustriales del oriente se benefician porque el gobierno los incentiva con compromisos de mayores volúmenes de compra de ETANOL y BIODIESEL para sustituir la importación de carburantes.
AGROINDUSTRIA
El sector de las oleaginosas industriales (soya, girasol), caña de azucar, ocupa el 63% del total producido por el sector, cereales y forrajes el 19% (donde está el trigo del cual sólo producimos el 30% y el 70% importamos de Argentina), y tubérculos, hortalizas y frutas el 18%.
Los que se benefician con la subida de los precios de los alimentos a nivel mundial son LOS QUE PRODUCEN: los terratenientes del oriente (70% de capitales extranjeros, brasileros, paraguayos, japoneses, etc.) y los que sufren el encarecimiento de los principales productos de la canasta familiar son las mayorías QUE CONSUMEN, que ven como peso a peso van subiendo los precios de la harina, el aceite, la manteca, los fideos y demás derivados de los granos.
A esto se suma el encarecimiento de la importación de insumos para la industria nacional que se reflejará en la subida de precios de los demás productos de consumo que no sean alimentos. Una INFLACIÓN IMPORTADA de países vecinos y de otros continentes que profundizará la carestía de las familias bolivianas.
Como se observa, la subida de precios de las materias primas y la energía beneficia a los sectores de la economía boliviana controlada por las transnacionales. APROXIMADAMENTE EL 70% DEL APARATO NACIONAL GENERADOR DE VALOR Y RIQUEZA ESTA EN MANOS DE ESTOS CAPITALES PRIVADOS EXTRANJEROS. PARA EL ESTADO BOLIVIANO NO QUEDA CASI NADA, Y PARA LOS BOLIVIANOS SÓLO PAGAR LA FACTURA DE LA GUERRA Y LA CRISIS ECONÓMICA MUNDIAL GENERADA POR LOS INTERESES DEL IMPERIALISMO NORTEAMERICANO, EUROPEO Y ASIÁTICO.
Corresponde a la clase obrera boliviana vanguardizar la lucha de la nación oprimida por expulsar, sin indemnización, a estos pulpos monopólicos del suelo boliviano. Inmediata estatización de toda la minería del oro, del zinc, plata. de la producción y comercialización del gas, la agroindustria y ganadería y la banca en manos de grandes corporaciones financieras extranjeras.
(POR Bolivia – MASAS nº2691)
