Somos partidarios de la Mano Dura ¡Contra los opresores!

¡Mano dura! Contra los contrabandistas, que sobrefacturan importaciones o las inventan para llevarse los dólares del país.

Contra los que subfacturan las exportaciones o no declaran todo lo que exportan para pagar menos impuestos y dejar dólares fuera del país.

Contra los que fugan divisas del país inventando deudas.

Mano dura contra los que saquean nuestras riquezas pagando miserables royalties e impuestos.

Contra los endeudadores del país que nos dejan las deudas para que las paguemos todos nosotros. Y siempre se las arreglan para estatizar sus deudas.

¡Mano dura! Contra los narcotraficantes que manejan miles de millones de dólares en los bancos, que compran a jueces, políticos y fuerzas represivas.

Contra los que negrean, contra los que no depositan las retenciones jubilatorias o de obra social.

Contra los que tienen sus fortunas en paraísos fiscales.

Contra los medios de comunicación que operan contra el interés nacional y de los trabajadores.

Contra los empresarios que se enriquecieron con la dictadura, con la patria contratista. Contra la Justicia que trabaja para todos ellos. Ninguno de los criminales es castigado. Sus crímenes están impunes.

Tenemos que aplastar todo el parasitismo, todas las mafias, todos los explotadores y saqueadores, toda la corrupción capitalista. Ellos son los criminales que bloquean las fuerzas productivas, que hacen que haya cada vez menos puestos de trabajo digno, que nos precarizan todo el tiempo. Ellos son los responsables de la marginalidad, de la inseguridad, de la violencia. Para erradicar estos males tenemos que terminar con el capitalismo que nos arrastra a la barbarie en todas sus formas.

Toda la inmundicia de la politiquería se ensaña con los más pobres y miserables para cancelar su derecho a la protesta, amenazan con retirar planes asistenciales, dejan de entregar comida a los comedores, quieren hacer creer que el problema son los vecinos, quieren hacernos creer que el narcotráfico nace en la villa. Que el problema es la sindicalización de los trabajadores, sus convenios. Que nos enfrentemos entre nosotros para que no podamos ver dónde está la raíz del problema.

La clase obrera aplicará la mano más dura, dictatorial, contra esa minoría que se roba el país. Por eso tiene que tomar el poder, terminar con la dictadura del capital, de una ultraminoría que acumula enormes ganancias a costa nuestra, del hambre y la miseria de la mayoría. La clase obrera y la mayoría oprimida sólo llegarán al poder por la vía de la revolución social.

(Nota de MASAS nº440)

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