Todas las empresas tercerizadoras de salud deben ser desconocidas y sus trabajadores pasar a planta
La empresa Comas Adolfo Santiago SRL es una de las empresas tercerizadoras que prestan diferentes servicios en el sistema de público salud de la provincia. Hasta hace unos años estas tareas eran llevadas a cabo por trabajadores estatales de planta. El proceso de privatización de la salud en Neuquén se implementó descentralizando sectores como el de camilleros, comedor y maestranza, mediante la tercerización de estos trabajos. En algunos hospitales aún queda personal dependiente del estado realizando estas tareas, el HHH es el único que no cuenta con camilleros de planta, desde su creación. De esta forma el Estado logra dos cosas, por un lado, evita tener a su cargo trabajadores a los cuales les debe garantizar salario, jubilación y todos sus derechos laborales. Y por otro, es la mejor manera de cambiar las condiciones laborales de los trabajadores sin que puedan defenderse. Es necesario conocer a los dueños de estas empresas que cuentan con el favor del gobierno y la complicidad del sindicato que no pelea por los derechos de estos trabajadores.
Esta política privatista avanza destruyendo el sistema público. Para frenarla es necesario expulsar las empresas tercerizadoras, recuperar y estatizar nuevamente los servicios privatizados. El despido de Aigo pone de manifiesto el problema de fondo: la tercerización de servicios y el rol de la burocracia patronal. En los hospitales de Neuquén los camilleros, maestranza y la cocina están tercerizadas y pertenecen a distintas empresas. Por lo menos dos de ellas son de un “socio” de Quintriqueo, por lo tanto la burocracia de la Verde, ahora devenida en patronal, despide a los trabajadores que reclaman y es parte del negocio de la precarización laboral. Hay que reclamar el pase a planta de todos y sacarse de encima a las empresas tercerizadas. Que existan tercerizadas dentro de los hospitales es una de las formas de privatización.
La dirección de ATE y CTA, Quintriqueo, tiene interés en que esta situación continúe, ya que utiliza a estos trabajadores para mantenerse en el poder. Durante el último conflicto amenazaban a los trabajadores tercerizados para que no unifiquen con los elefantes, y los presionó para aprobar el acta del gobierno en la asamblea.
Ante semejante situación de los trabajadores de la primera línea se plantea la imperiosa necesidad de recuperar el sindicato de manos de la burocracia. Para poder luchar por un sistema público que garantice la salud para todos y las condiciones de trabajo, salario y jubilación de sus trabajadores.
Por un sistema de salud único, gratuito y estatal. Expropiación y estatización de todas las clínicas y laboratorios privados
Pase a planta de todos los trabajadores de la salud eventuales y tercerizados
Basta de perseguir a los que luchan, abajo los sumarios y descuentos.